Ante la crisis económica y sanitaria que se vive en el país por el Covid-19, estados y municipios presentaron una reducción anual de 80,707 millones de pesos en recursos federales durante los primeros nueve meses del año, la mayor caída en transferencias de la Federación a los gobiernos locales desde que se tiene registro (1990).
- El gasto federalizado, que se integra de participaciones, aportaciones, subsidios y convenios, ascendió a 1.35 billones de pesos entre enero y septiembre del 2020, frente a 1.43 billones en igual lapso del 2019, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Este resultado derivó de los estragos de la pandemia que mermaron la actividad económica y el nivel de recaudación. Desde mayo, el gasto federalizado exhibe caídas al hilo, recordando que dicho mes y abril fueron de total confinamiento y paro de actividades no esenciales, mientras los meses posteriores la operatividad de los sectores fue baja.
- La reducción de 80,707 millones de pesos fue producto de las disminuciones anuales por 56,007 millones en recursos para protección social en salud, 45,677 millones en participaciones, 2,512 millones en convenios de reasignación y 1,095 millones en el Ramo 23, además de aumentos por 22,327 millones en aportaciones y 2,258 millones en convenios de descentralización.
La actual crisis económica fue la principal razón por la cual estados y municipios recibieron menos gasto federalizado (el Producto Interno Bruto -PIB- nacional descendió 8.6% a tasa anual desestacionalizada en el tercer trimestre del año), y por ende, bajó la Recaudación Federal Participable (RFP) en los primeros nueve meses del presente año (decrecimiento de 9.9% anual real).
Los fondos del gasto federalizado, particularmente del Ramo 28 (participaciones), dependen, además de la variable población, de la actividad económica y petrolera y de la recaudación. Este ramo tiene dos meses de rezago con el comportamiento de la economía y uno con la recaudación.
En tanto, en el ramo de protección social en salud, en este 2020, derivado de los cambios en el servicio de salud pública, los recursos del Instituto Nacional de Salud para el Bienestar no se incluyeron por el momento en el gasto federalizado (no se aclara el destino).
En términos reales, el gasto federalizado descendió 8.7% a tasa anual en el acumulado de enero a septiembre, el peor resultado, para igual lapso de comparación, desde el 2009 (9.8 por ciento).
- Esta variación negativa fue consecuencia de contracciones en recursos para protección social en salud (100.0%), convenios de reasignación (64.8%), participaciones (9.6%), Ramo 23 (7.2%) y convenios de descentralización (0.9%); el único incremento se observó en aportaciones (0.6%), cuyo objetivo es abatir, a través de fondos programables, rezagos en infraestructura, educación, seguridad, salud, financiamiento, entre otros.
Los ramos más importantes del gasto federalizado son participaciones (concentró 47.8% del total de1.35 billones de pesos) y aportaciones (43.0 por ciento).
El principal motor, castigado
En los primeros nueve meses del 2020, las entidades que recibieron más gasto federalizado fueron Estado de México (152,318 millones de pesos), Ciudad de México (113,275 millones), Veracruz (86,797 millones), Jalisco (76,010 millones) y Chiapas (67,707 millones).
- Al comparar con los recursos que recibieron los gobiernos locales en igual periodo del 2019, se deduce que las mayores reducciones fueron en Ciudad de México (23,036 millones de pesos), Estado de México (13,906 millones), Guanajuato (5,780 millones), Puebla (5,526 millones) y Jalisco (4,179 millones).
- Por variación anual real, la disminución más pronunciada también fue para la capital del país (19.6%), debido al desplome en consumo y recaudación por el Covid-19.
- Le siguieron Guanajuato (12.8%), Campeche (11.4%) y Estado de México (11.3%); ninguna de las 32 entidades creció en gasto federalizado.
15 estados reciben menos de lo que dan
De los 32 estados del país, 15 reciben menos recursos de la Federación de los que aportan a la recaudación nacional, según datos de la calificadora HR Ratings.
En ese grupo están ocho de las 10 entidades que integran la Alianza Federalista, la cual analiza abandonar el Pacto Fiscal por considerar que la distribución de los recursos es desigual.
“El federalismo o pacto fiscal, por ley, busca cerrar las brechas económicas y sociales entre los gobiernos locales, no reembolsar la totalidad de lo que aportan, de ser así, no tendría caso su existencia”, comentó José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC).
El Pacto Fiscal define las reglas de recaudación y distribución de recursos a estados y municipios por parte de la Federación.
A través de él, los gobiernos locales ceden a la administración central la potestad de recaudar impuestos, como IVA, ISR y el IEPS en sus territorios, a cambio de recibir una partida de recursos.
La distribución del dinero se lleva a cabo a través de fórmulas contenidas en la Ley de Coordinación Fiscal, las cuales consideran rubros como población, crecimiento, pobreza y desigualdad.
- A partir de ello, Colima, Ciudad de México, Tamaulipas y Nuevo León son los menos favorecidos, pues por cada peso que se recauda en su territorio reciben menos de 24 centavos, según datos de 2018 de HR Ratings.
- En cambio, Chiapas, Guerrero y Oaxaca, tres de los estados con mayor pobreza, reciben entre 6.10 y 7.88 pesos.
El inconveniente es que la aportación de los estados que menos dan a la Recaudación Federal Participable prácticamente está estancada, lo cual se debe de discutir, señaló el director ejecutivo de Finanzas Públicas e Infraestructura en HR Ratings, Roberto Ballinez.
- Durango y Guanajuato son las dos entidades de la Alianza Federalista que reciben más de lo que dan (5.22 y 1.58 por cada peso recaudado). El resto: Aguascalientes, Jalisco, Coahuila, Michoacán, Chihuahua, NL Tamaulipas y Colima, capta menos.
Sobre el tema, los 10 gobernadores que integran la Alianza Federalista han pedido una reunión directamente con el presidente Andrés Manuel López Obrador para revisar los términos del Pacto Fiscal y poder llegar a una renegociación que incentive a los estados que captan más impuestos.
Llaman a negociar gasto federalizado
Legisladores y especialistas advirtieron que ante la caída del gasto federalizado es necesario revisar las asignaciones propuestas para el Presupuesto de Egresos del 2021.
Señalaron que el daño a las entidades y municipios puede ser peor, porque hay cifras “optimistas” en la estimación de ingresos, que, ante la caída del crecimiento económico, es posible que no se cumplan.
En reunión de Parlamento Abierto de la Comisión de Presupuesto, diputados de MC y PRI alertaron que no sólo se trata de la caída de participaciones y aportaciones, sino también de la cancelación de programas y convenios que afectan el presupuesto local.
Tonatiuh Bravo, coordinador de MC, pidió hacer una propuesta que escuche las demandas de los gobiernos estatales y municipales ante la eliminación del componente federalizado en diversos programas de salud y educación.
De aprobarse el planteamiento presidencial, aseguró, la bolsa del gasto federalizado pasaría de un billón 982 mil millones, aprobados para este año, a un billón 867 mil millones de pesos en el 2021./Agencias-PUNTOporPUNTO