Redacción
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos envió una recomendación al secretario de Marina, Vidal Francisco Soberón Sanz, luego de acreditar que elementos de esa dependencia violaron los derechos humanos de seis personas en Veracruz.
En los hechos, atribuidos a elementos del 7 Batallón de Infantería, a una de ellas se vulneró la inviolabilidad del domicilio, cuatro fueron torturadas y contra tres se ejerció violencia sexual.
El 9 de mayo de 2012 y el 2 de diciembre de 2013, una de las víctimas presentó escritos de queja ante la CNDH, en los que manifestó que el 13 de abril de 2012, aproximadamente a las 11:00 horas, desayunaba sola en un puesto de comida ubicado en Boca del Río, Veracruz, cuando una persona se le acercó y le apuntó a la cabeza con un arma, le cubrió la cabeza con una manta negra y le dijo que si no hacía lo que le decían la matarían.
Fue subida a un vehículo y trasladada a un cuartel de la Semar, sin explicarle las razones o el motivo de su detención; en ese lugar, los elementos navales le propinaron golpes, descargas eléctricas en su órgano sexual y en los senos.
Finalmente, el 14 de abril de 2012 fue trasladada a la SEIDO, donde se le acusó de delincuencia organizada y portación de armas de fuego, iniciándose la averiguación previa correspondiente.
Otra de las víctimas relató que estaba en su casa, también en Boca del Río, cuando elementos de la Semar llamaron a la puerta e ingresaron para golpearla y trasladarla con otras cuatro personas a instalaciones navales.
En ese lugar, la víctima fue agredida físicamente y recibió descargas eléctricas en la zona genital y en ambos pies, lo que tuvo como consecuencia que le amputaran un dedo del pie derecho.
Posteriormente, las seis víctimas fueron llevadas al aeropuerto y trasladadas a la SEIDO, en la Ciudad de México, donde fueron puestas a disposición del Ministerio Público de la Federación, el 14 de abril de 2012.
La CNDH señaló que el derecho a la libertad personal fue violado con motivo de la detención arbitraria cometida por los elementos de la Armada, ya que se demostró que actuaron en dos distintos momentos, pues una de las víctimas no estaba con el resto de los detenidos, quienes no lo conocían.
Al ingresar los elementos aprehensores al domicilio de una de las víctimas sin contar con una orden de cateo emitida por autoridad judicial competente, la detención fue arbitraria y quedó acreditada la vulneración al derecho a la inviolabilidad del domicilio.
El derecho a la seguridad jurídica de las seis víctimas fue violentado como consecuencia de un informe de puesta a disposición elaborado por cuatro autoridades responsables, que refiere un acontecimiento distinto a cómo ocurrieron los hechos, para justificar las arbitrariedades e irregularidades que dieron origen a la detención de los quejosos.
Por lo anterior, la CNDH formuló puntos recomendatorios al Secretario de Marina, consistentes en proporcionar a las seis víctimas la atención psicológica y médica por personal profesional especializado y de forma continua hasta que alcancen su total sanación psíquica y emocional.