Un estudio internacional publicado el verano pasado, en el que ha participado el Instituto de Geociencias y Georecursos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de Pisa (Cnr-Igg), liderado por la Universidad de Murcia en España, ha permitido obtener, por primera vez, una estimación de cómo el cambio climático afecta la extensión de las áreas quemadas por incendios.
- Un estudio que vuelve a cobrar gran interés en este enero de 2025, tras la catastrófica situación que vive Los Ángeles. Si bien las actividades humanas, ya sean intencionales o accidentales, a menudo provocan incendios, el clima determina su extensión.
- Una vez iniciadas las llamas, queman una superficie que depende de las condiciones meteorológicas durante el incendio, como la presencia de fuertes vientos, pero también de otros dos factores cruciales: la disponibilidad de combustible, como madera y vegetación seca, y la medidas de prevención y control de eficacia.
- El estudio, realizado a escala global, destaca que el estado y la cantidad de combustible están estrechamente ligados a las condiciones climáticas de la zona afectada por los incendios.
El clima determina la extensión de los incendios
- “Los resultados de nuestra investigación muestran que las condiciones climáticas en el período inmediatamente anterior a los incendios son cruciales en grandes regiones del mundo, especialmente en los ecosistemas más húmedos, porque determinan el estado del combustible vegetal.
- Sin embargo, las condiciones climáticas de los años anteriores también pueden jugar un papel importante, especialmente en las zonas más secas, porque determinan la abundancia de vegetación que se puede quemar”, explica Antonello Provenzale, director del Cnr-Igg.
- “En gran parte del planeta, aproximadamente el 77% de las zonas de incendios continentales y alrededor del 60% de los cambios anuales en el área quemada están directamente relacionados con las variaciones climáticas observadas de un año a otro”, continúa.
Los resultados son fruto del análisis de veinte años de datos recogidos tanto sobre el terreno como por satélite: un trabajo que ha permitido crear la primera base de datos mundial que recoge información sobre incendios forestales procedentes de fuentes nacionales.
- “Esta herramienta combina datos de diferentes partes del mundo, proporcionando una visión integral de las áreas afectadas por incendios”, dice Andrina Gincheva, de la Universidad de Murcia en España, y autora principal del artículo.
“Gracias a esta base de datos, los expertos podrán estudiar mejor cómo evolucionan los incendios forestales a lo largo del tiempo y comprender qué factores los influyen.
- Este conocimiento será invaluable para desarrollar estrategias más efectivas para prevenir y gestionar los incendios, un desafío cada vez más importante en muchas partes del mundo”.
- El estudio demuestra claramente la dependencia directa de la superficie quemada de las condiciones climáticas y cómo las variaciones climáticas influyen en la dinámica de los ecosistemas, determinando en última instancia la extensión de los incendios.
- Por supuesto, otros factores también pueden influir en algunas zonas, como el tipo y distribución de la vegetación, la capacidad de identificar rápidamente el inicio de un incendio y la velocidad de las intervenciones de control.
“Una vez más, vemos cómo el cambio climático tiene un impacto directo en el medio ambiente y en nuestra sociedad, y cómo es necesario abordar la crisis climática sin demora y al mismo tiempo preparar medidas adecuadas para predecir los peligros naturales, a fin de poder “Para intervenir rápidamente”, concluye Provenzale.
Cambio climático incrementará los incendios en ciudades
Un estudio de la Universidad Hefei de Ciencia y Tecnología de China, busca entender qué pasa -y qué pasará- directamente en los entornos urbanos, Lo hace analizando datos de 2.847 ciudades en 20 países, en Europa, Asia y América del norte -se han dejado fuera África y el sur del continente americano- para explorar la relación entre la temperatura del aire y los distintos tipos de incendios urbanos. La conclusión es que crecerán, sobre todo en parques urbanos, vertederos o terrenos baldíos cerca de las ciudades. Pero, al menos, no en viviendas.
¿Cómo se hizo?
Los autores recopilaron datos de miles de incendios llamados «urbanos», ocurridos en el interior de las ciudades, y los compararon con datos históricos de clima y los que proyecta el IPCC. Luego aplicaron un modelo para predecir la relación entre la temperatura media mensual máxima y la frecuencia de incendios, considerando diferentes varios escenarios de calentamiento global
- Se investigaron cuatro tipos de incendios urbanos: La primera categoría son «edificios», es decir, viviendas, oficinas y estructuras. La segunda son «vehículos»: coches, camiones y transporte público. Luego había dos categoría más calificadas de «exteriores». La primera son zonas no boscosas.
- Por ejemplo, basureros, terrenos baldíos o áreas urbanas sin vegetación. La última son incendios en la llamada vegetación urbana: los bosques o parques que hay dentro de la ciudad. Con estos cuatro tipos de paisajes, la investigación evaluó como estas zonas responden y responderán a cambios de temperatura.
- La investigación dice que «la frecuencia de incendios en edificios sigue una relación cuadrática con la temperatura». Esto quiere decir que «disminuye en temperaturas de confort -cerca de los 24°C- pero aumenta cuando la temperatura está por debajo o por encima de este umbral.
En el caso de los incendios en vehículos y los que se producen en «exteriores de la ciudad», la incidencia aumenta «de forma lineal» con la temperatura. Por cada grado que sube la temperatura, los incendios en vehículos aumentan un 2.5%, y los de exteriores crecen un 4.7%.
¿Qué pasará en 2100?
El estudio hace varias proyecciones según distintos escenarios que traza el IPCC sobre aumento de emisiones de Co2 y temperaturas. En el escenario más grave, el de mayor aumento de las temperaturas, llamado SSP5-8.5, la frecuencia de incendios en edificios disminuiría en un 4.6% pero los incendios en vehículos aumentarían un 11.6%, en parte debido a fallos mecánicos por sobrecalentamiento. Los incendios en espacios exteriores son los que más aumentarían: un 22.2%. El dato sugiere que habrá un mayor riesgo en las ciudades con climas más cálidos.
- También señala que «las ciudades con climas más fríos actualmente serán más vulnerables a incendios en edificios conforme las temperaturas aumenten», porque están menos preparadas.
- Las diferencias en infraestructura contra incendios serán claves porque la poca capacidad de respuesta de los servicios de emergencia podría agravar la situación. Sobre todo en países con menor desarrollo.
Este proyección tiene, a su vez, algunos factores «correctores», pero son , más o menos, los obvios. Por ejemplo, precide que habrá menos efectos en las ciudades con más humedad y más altitud.
- También señala que en ciudades más densamente pobladas, «los incendios de vehículos y exteriores tienden a ser menos frecuentes, posiblemente por un menor uso de automóviles privados y mejores infraestructuras de gestión de residuos».
¿Qué soluciones propone?
El estudio habla de una «reasignación de recursos hacia los servicios de bomberos donde haga falta». Recomienda ajustar la distribución de brigadas y equipos de extinción en función de los riesgos, a las zonas más proclives.
- También pide revisar todo lo que tiene que ver con normas de construcción de edificios, seguridad de vehículos y -sobre todo- gestión de residuos. Sin embargo, concluye, lo más importante sería «limitar el calentamiento global» para reducir sus efectos. Parece, a estas alturas, la cuestión más complicada.
Incendios forestales se duplican en México
En los primeros dos meses del año se registraron en nuestro país 545 incendios forestales, más del doble de los que hubo en el mismo periodo de 2024, según datos de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
- En su reporte de incendios forestales, Conafor también señala que fueron afectadas 31 mil 138 hectáreas, la cifra más alta desde 2019.
- De acuerdo con información de las autoridades medioambientales, en los dos primeros meses del año 30 estados del país resultaron afectados. Las entidades federativas con mayor presencia de siniestros fueron:
- Jalisco, Chihuahua, Michoacán, Ciudad de México, México, Puebla, Morelos, Durango, Veracruz y Aguascalientes, que representan 82 por ciento del total nacional.
“Del total nacional de incendios forestales, 114 (21 por ciento) correspondió a ecosistemas sensibles al fuego, en una superficie de dos mil 540.23 (nueve por ciento) hectáreas”, dice el reporte.
Las entidades federativas con mayor superficie afectada fueron: Baja California, Chihuahua, Sinaloa, Jalisco, Aguascalientes, Zacatecas, Durango, Michoacán, Chiapas y México.
- Los siniestros siguen en la primera semana de marzo. En Tamaulipas, con apoyo de una aeronave con helibalde y cuadrillas terrestres, autoridades trabajaban ayer por la tarde para sofocar un incendio registrado en el pueblo mágico de Tula.
- De acuerdo con el titular de la Coordinación Estatal de Protección Civil de Tamaulipas, Luis Gerardo González de la Fuente, desde el martes brigadistas del municipio de Tula, del estado y voluntarios trabajan para sofocar el incendio en el ejido El Coronel.
- “El incendio lleva un control de 65 a 70 por ciento. No puedo decir que un poco más porque hay mucho viento, pero se trabaja para que no se reactive”, comentó González de la Fuente ayer al mediodía.
Explicó que el helicóptero de Protección Civil apoya en la extinción del incendio con helibaldes para reducir la posibilidad de que crezca.
“Nosotros contamos con nuestro equipo. Este helicóptero apoyará con el agua y ya se instaló la ‘calabaza’, que es el contenedor del que se toma el líquido”, apuntó.
- En Chihuahua, hasta ayer, había seis incendios forestales activos, que han devastado poco más de mil hectáreas, según el Sistema Nacional de Información Forestal. La zona más afectada fue la zona boscosa del municipio de Madera, que registraba dos incendios. En uno de ellos, un brigadista perdió la vida.
- Las densas nubes de humo redujeron la visibilidad en las comunidades, advirtió Bibiana Olivas, residente de la zona, quien llamó a la ciudadanía para apoyar con agua embotellada, sueros, alimentos no perecederos, herramientas de trabajo, guantes, cubrebocas y linternas.
Durante las últimas horas, las intensas ráfagas de viento obstaculizaron el avance de los combatientes en el control de los dos incendios que afectan a Madera, los cuales están devastando el hábitat de diversas especies de flora y fauna que habitan en el área natural protegida Campo Verde.
- Según el SNIF, hasta ayer en la tarde, en la zona de Las Minitas el fuego había consumido mil 652 hectáreas, y El Picacho Azul, había mil 149 hectáreas afectadas.
- En Puebla, un incendio forestal consumió al menos 15 hectáreas de pastizales, arbustos y árboles de mango en el cerro Oztontepeti, perteneciente al municipio de Jolalpan.
- Movilizando a cuerpos de emergencia y voluntarios para evitar que las llamas alcanzaran zonas habitadas, lo cual finalmente fue controlado.
Desde las 15:00 horas del pasado lunes y parte del martes, Protección Civil Municipal, la Policía Municipal, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, personal del Ayuntamiento y ejidatarios sumaron esfuerzos para sofocar el fuego.
En total, 57 personas participaron en las labores de contención, logrando controlar el incendio sin necesidad de evacuaciones./Agencias-PUNTOporPUNTO