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La soprano y maestra de canto clásico de la Casa de la Cultura Tlaxiaqueña, Rocío Herrera Gardea, fue despedida por haberse negado a cantar para el senador Benjamín Robles Montoya y el diputado Federal Electo, Sergio López Sánchez, a exigencias del maestro de la banda de música, Alejandro Zamora, quien pretendía quedar bien con los políticos para permanecer a cargo de la banda de música; en complicidad con el director de la institución, Miguel Ángel Martínez Oseguera, tomaron la decisión de manera arbitraria.
Rocío Herrera Gardea denunció ante los medios de comunicación el despido injustificado, presentando grabaciones intimidatorias por parte del profesor de música, Alejandro Zamora, en contubernio con el director de la Casa de la Cultura, después que el pasado 14 de agosto presentó un concierto coral en el marco de las festividades patronales de Tlaxiaco.
En las agresiones verbales probadas a través de grabaciones y que fueron presentada a los medios, se escucha que Zamora y Martínez Oseguera intimidan a la cantante y reclaman rumores y dimes y diretes, (nada oficial) y que desobedeció los altos mandos de la Casa de la Cultura.
La notificación del despido fue comunitada por Alejandro Zamora, el cual no cuenta coo con un cargo en la administración pública municipal; el hecho fue avalado por Martínez Oseguera, quien pasó por encima de la autoridad del Presidente Municipal Alejandro Aparicio y el responsable de la Regiduría de Educación y Cultura, Victorino Gutiérrez Osorio.
La síndica Hacendaria, Rocío López Cruz, escuchar que no existía elemento para el despido de la profesora, sin embargo, sólo se concretó a informar que la despedida sería dada de baja en la nómina..
Los padres de familia de los niños y jóvenes que acuden a las clases de canto aseguran que el maestro Zamora, intimida, ofende e insulta a las y los niños que asisten a la banda de música, sin embargo cuenta con el consentimiento de Martínez Oseguera.
Es notoria la decadencia de la Casa de la Cultura tlaxiaqueña, pues por órdenes del director de la misma, también se despidió al profesor de música José Luis Martínez Ríos, a Santiago Avendaño García, quien en su renuncia, advirtió la mala dirección de la Casa de la cultura, y ahora despiden a Rocío Herrera Gardea, por desobediencia, por no cantarle a los políticos.
«El celo artístico»
El pasado 14 de agosto, en el marco de la fiesta patronal del Tlaxiaco, se presentó con el coro de la Casa de la Cultura, el tenor Brasileño Adriano Pinheiro, quien también compartió el escenario con la Soprano Roció Herrera Gardea.
Durante su denuncia ante los medios, Roció Herrera Gardea, contó con el respaldo de un grupo de artistas tlaxiaqueños.
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