Redacción
Alejandro Zapata Sánchez, identificado por la Policía Federal (PF) como presunto operador de una red dedicada a la extorsión contra periodistas y medios de comunicación, fue nombrado director general de Desarrollo Social de la delegación Cuajimalpa, por el jefe delegacional Miguel Ángel Salazar Martínez.
El cargo se le asignó a Zapata Sánchez a pesar de que se encuentra sujeto a una investigación por parte de la Procuraduría General de la República (PGR) y que un juez le negó un amparo contra la posible orden de aprehensión, presentación o arraigo que podría girarse en su contra.
El ahora responsable de la política social de esa delegación fue grabado junto con Adrián Rubalcava Suárez y Juan Carlos Zaragoza Ríos, ex empleado de Televisa, por la Unidad Científica de la Policía Federal cuando acordaba realizar una serie de campañas de difamación y amedrentamiento contra los portales de noticias: Aristegui Noticias, Cuna de Grillos y SinEmbargo.
El ataque también sería dirigido a los rivales políticos de Adrián Rubalcava, entre los cuales estaban: Luis Espinoza Cházaro, ex aspirante a jefe delegacional de Cuajimalpa, Mauricio López, ex presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el DF y Carlos de Valle, ex director de Desarrollo Social de Cuajimalpa.
Además, de acuerdo con esas pruebas, el gobierno federal investiga el financiamiento de golpes a medios de comunicación con recursos públicos, por parte de Rubalcava y Zapata.
Alejandro Zapata Sánchez, periodista de profesión y ahora titular de la Dirección General de Desarrollo Social, percibe un sueldo de 67 mil pesos mensuales, más aguinaldo, prima vacacional, despensa y una “asignación adicional” como parte de un “sistema de compensación” que no está precisado en la página de internet de la delegación.
Su dependencia tiene a cargo los apoyos y asistencia social a grupos prioritarios y vulnerables, como: la Dirección de Atención a la Mujer; la Dirección de Asistencia Social y Servicios Médicos; la Dirección de Promoción Deportiva y a la Dirección de Cultura Cívica.
Sin embargo, una persona que trabajó con Zapata Sánchez dijo que él se refería con palabras despectivas a la gente humilde y aspiraba a una vida llena de lujos y derroche.
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