Petróleos Mexicanos (Pemex) otorgaba ingresos al gobierno, que de algún modo compensaban el apoyo que siempre ha facilitado a la empresa. Sin embargo, con el deterioro de la situación productiva y financiera de la paraestatal, el neto de su participación será nulo, advirtió la analista soberana de México en Moody´s, Ariane Ortiz-Bollin.
- “A partir de este año estimamos que la contribución de Pemex será prácticamente nula. Esto no significa que no vaya a otorgar nada. Anticipamos que la aportación en pago de impuestos y transferencias rondará 2% del PIB, pero luego el gobierno de alguna forma ya sea con reducciones en la tasa contributiva, transferencias de capital o alguna otra forma dará un apoyo equivalente a 1% del PIB por lo menos”, comentó en conferencia remota.
Ahí mismo, la analista líder para Pemex, Nymia Almeida acotó que “El apoyo del gobierno es fundamental para la calificación de la petrolera y es muy importante que el gobierno sea suficientemente fuerte para apoyarle. Los riesgos de Pemex tienen que ver con la fortaleza del soberano”, advirtió.
De acuerdo con Aleida, el apoyo comprometido por el gobierno federal para Pemex en este año no tiene precedentes.
“Hemos visto apoyos desde el 2016 por diferentes razones, pero en el 2021 ya se comprometieron 6,900 millones de dólares para la empresa. Una cifra que no tiene precedentes en la historia”, aseguró.
- La experta en temas de energía y petróleo insistió, como lo ha hecho desde enero, en que el gobierno materializará una transferencia de otros 15,000 y 19,000 millones de dólares a Pemex este mismo año.
- La analista soberana consignó entonces que una empresa petrolera productiva, le permitiría al gobierno destinar estos recursos para estimular la economía y nos estaríamos recuperando a tasas más rápidas.
Ortiz-Bollin recalcó que la inversión ha pasado de 22% del PIB a 18% ante la preocupación del sector privado de cambios legales o regulatorios que rebasen al sector energético. Esta incertidumbre sí está afectando a las decisiones de inversión y podría tener impacto más duradero en el crecimiento del mediano plazo.
La calificación soberana
En la conferencia organizada para dar detalles sobre la ratificación de la nota soberana, Ortiz–Bollin destacó que es la fortaleza fiscal la que sigue anclando a México arriba del grado de inversión.
- Pero el apoyo total que otorga el gobierno a Petróleos Mexicanos (Pemex) distrae recursos públicos para estimular a la economía, generándole una desventaja comparativa con los emisores que tienen su misma calificación, sostuvo.
Afirmó que es poco probable anticipar que el país pierda los tres escalones arriba del grado de inversión en el corto plazo, como han anticipado estrategas de inversión.
“Vemos presión en la flexibilidad fiscal sobre todo para un emisor calificado en “Baa1” (tres escalones arriba del grado de inversión)”, reconoció. Y la perspectiva Negativa indica que se tomarán un tiempo, que pude ir de 12 a 18 meses.
Reforma administrativa, no tributaria
La analista soberana descartó que la reforma tributaria que planteará el Ejecutivo en la segunda parte de este año, alcance para descargar la presión de las finanzas públicas por su compromiso con Pemex.
“Creemos que esta reforma va a ser más administrativa que tributaria y si bien puede tener un impacto positivo en las finanzas públicas, no pensamos que la recaudación va a aumentar de manera significativa ”.
- Si el cambio fiscal logra aumentar ingresos en por lo menos un punto del PIB, podrían considerar un cambio en la perspectiva para dejarla estable. De hecho, la analista detalló que la ratificación de la nota, otorga un lapso de 12 a 18 meses para ver como se resuelve la tensión en las finanzas públicas y el crecimiento de la economía.
Respondió que “independientemente de lo que pase en las elecciones legislativas de junio, es poco probable un cambio de timón importante en las políticas públicas observadas hasta ahora en: austeridad, control de gasto y limitar el tamaño de la deuda. Vendrán pocos cambios en la política energética”.
Pemex, principal riesgo para calificación crediticia de México
Pemex continúa siendo el principal riesgo para la calificación crediticia de México, debido al apoyo financiero que la petrolera recibirá del gobierno federal, el cual será equivalente a al menos un punto del PIB, indicó Ariane Ortiz-Bollin, vicepresidenta senior de Análisis de Moody’s Servicios a inversores.
- A pesar de que este jueves la agencia calificadora mantuvo la nota de México en una escala de Baa1 con perspectiva negativa, sigue viendo riesgos para la nota crediticia del país, principalmente provenientes de la empresa del Estado.
“El primer factor de riesgo sigue siendo Pemex. Ya está incorporado en la calificación el apoyo continuo y sustancial del gobierno de alrededor de un punto del PIB al año, pero qué podría presionar a la baja a la calificación, que el apoyo fuera todavía mayor ”, comentó la analista en videoconferencia.
- Además, Ortiz-Bollin destacó que la contribución neta de Pemex a las arcas del gobierno mexicano será de cero, ya que si bien la empresa estará aportando al gobierno ingresos de alrededor de un punto porcentual del PIB, los apoyos de la administración federal serán similares .
- “Eso es lo que estamos tomando en cuenta, cero en términos netos del aporte de Pemex al soberano”, destacó el especialista.
No obstante, la reforma a la Ley de Hidrocarburos aprobada por el Congreso podría tener un impacto positivo para la petrolera por el favorecimiento que le da la regulación, aunque sería mínimo, indicó Nymia Almeida, analista principal para Pemex de Moody’s
«No veo gran impacto en la calificación de Pemex, pero si hay alguna consideración al respecto sería desde un punto de vista positivo para su posicionamiento competitivo en el país», comentó.
Almeida apuntó que para Pemex el mayor riesgo es que su principal fuente de recursos siga siendo el gobierno, ya que si el gobierno pierde fortaleza financiera esto tendrá impacto en la petrolera.
- Otro riesgo para la calificación soberana de México, dijo Ortiz-Bollin, es que el crecimiento económico sea menor al pronosticado debido principalmente a que la recuperación del mercado doméstico sea más débil.
Subrayó que la recuperación en el consumo y en la industria de la construcción no ha sido robusta y que, en la medida que estos sectores se vean rezagados podría disminuir en el crecimiento del país que se espera de dos por ciento en promedio del año 2023 en adelante.
- Asimismo, destacó que el ritmo de inversión privada ha disminuido y que ahora representa 18 por ciento del PIB, cuatro puntos porcentuales menos, un cambio que puede tener impacto negativo en la productividad y el crecimiento económico del país.
La analista indicó que las oportunidades de inversión en México estarían limitadas ante la desconfianza de la iniciativa privada por los cambios de reglas y confrontaciones con el gobierno, principalmente en el sector energético.
Pemex ostenta 36% de la deuda de más alto riesgo en América Latina
De entre 87 compañías de América Latina, que emiten deuda y que pagan altas tasas de interés a los inversionistas, Petróleos Mexicanos (Pemex) concentra el 36% de las obligaciones, de acuerdo con la calificadora de riesgo crediticio Moody’s.
Al primer trimestre del presente año, de un total de 162,000 millones de dólares de la deuda en circulación de Latinoamérica y que es llamada de alto rendimiento, por los elevados premios que pagan, el 36%, esto es, 58,000 millones de dólares corresponden a la petrolera mexicana.
- De la deuda total, más de una tercera parte corresponde a México (Pemex), el resto se reparte 16% en Brasil, 11% en América Central y el Caribe, 6% en Argentina y 6% en Colombia, entre otros.
- Para lo que resta del presente año, vencen 3,900 millones de dólares de deuda riesgosa de la cual 3,200 millones de dólares corresponden a Pemex, que tiene una calificación de Ba2 con perspectiva negativa.
- La calificación Ba2, en la escala de Moody’s, significa bono basura o que la calidad del crédito es cuestionable.
Los bonos de alto rendimiento, conocidos como high yield debt, son instrumentos de deuda corporativa que dan un rendimiento alto, pero que tienen una baja calificación, ya sea menor o igual a BBB, dirigidos a los operadores con alta tolerancia al riesgo.
- En el Plan Anual de Financiamiento 2021 de Pemex, la empresa productiva del Estado, presentado al Congreso de la Unión, se determinó buscar una estrategia de eficacia financiera, por lo que la empresa se comprometió a trabajar bajo una política de responsabilidad en el uso de las fuentes de financiamiento.
- De acuerdo con Moody’s, la deuda de Pemex es más cara que la de la empresa Petrobras, de Brasil, ya que la brasileña tiene una perspectiva estable, contraria la perspectiva negativa de la mexicana.
En el reporte al cuarto trimestre del 2020, Pemex registró un total de 100,100 millones de dólares en deuda, con vencimientos repartidos de 2021 hasta 2036. Los plazos por vencerse más próximos son 6,500 millones de dólares para este 2021, más de 5,900 millones para 2020 y 6,600 millones en 2023.
- La deuda extranjera (escala internacional) de Petróleos Mexicanos está calificada en Ba2- con la agencia Moody’s. Fitch Ratings, que fue despedido por Pemex recientemente, lo tenía con una nota de BB-, grado especulativo. Mientras que Standard & Poor’s, lo tiene con grado BBB, que es grado de inversión.
De acuerdo con el reporte de Moody’s, el segmento de petróleo y gas representan 90% de los 5,700 millones de dólares del total de deuda de alto rendimiento que tiene vencimiento en los próximos 12 meses, de los cuales el 87% es de Pemex y sólo 3% de la firma Argentina Pan American Energy con 167 millones de dólares.
Emisiones al primer trimestre
El informe de Moody’s precisa que las emisiones de alto rendimiento en América Latina registraron un total de 7,800 millones de dólares al primer trimestre del 2021, con un total de ocho colocaciones realizadas, el mejor nivel de un primer trimestre en 10 años.
- Aunque fue un mejor primer trimestre, la emisión sigue por debajo de los 8,900 millones de dólares del segundo trimestre del 2020, y caera sólo 4,400 millones de dólares en el tercer trimestre, pasó a 5,500 millones el cierre del año y ahora con 7,800 millones de dólares a marzo del 2021.
Las emisiones incluyeron dos transacciones nuevas de bonos ligados a sustentabilidad.
- La deuda nueva continúa liderada por la categoría Ba que representa el 42% de la emisión del trimestre, aunque también hubo un incremento en las emisiones de categoría B, un 31% del total, con deuda emitida por 2,400 millones de dólares, monto superior al promedio trimestral de 1,200 millones en 2020.
- La firma comentó que las necesidades de refinanciamiento son bajas por el resto de 2021 y la calidad crediticia de los vencimientos de deuda en 2021 y 2022 se mantiene fuerte con una alta concentración dentro de la categoría Ba.
Detalló que “un total de 3,900 millones de dólares de deuda calificada está programada para vencer en los últimos tres trimestres de 2021, de los cuales 3,200 millones corresponde a Pemex, con nota Ba2 negativa. Los vencimientos de 2022 incrementarán a 8,000 millones de dólares, pero 67% corresponde a emisores dentro de la categoría Ba, incluyendo 4,000 millones de Pemex”.
Además, la calificadora estadounidene de riesgo crediticio indicó que subieron tres calificaciones en el primer trimestre. “Las notas que subieron son las de InRetail Pharma y de Suzano y Gerdau, con lo cual salen del universo de alto rendimiento”./Agencias-PUNTOporPUNTO