La nueva ley entrará en vigor el 1 de enero. La enmienda se produce después de que el Comité Central del Partido Comunista de China decidió en octubre aprobar la propuesta universal de dos hijos.
La ley de planificación familiar actual entró en vigor en 2002 para ayudar a estabilizar la tasa de natalidad que se había reducido desde que la planificación familiar fue introducida en la década de los setenta.
En 1980, el gobierno comenzó a limitar a la mayoría de las parejas a tener un solo hijo. Por ejemplo, a las parejas rurales se les permitía tener dos hijos si el primero era niña.
En 2013, China permitió a las parejas tener un segundo hijo si alguno de los padres era hijo único.
La política de «una pareja, un hijo» previno alrededor de 400 millones de nacimientos y redujo la presión sobre los recursos y sobre el medio ambiente.
Pero surgieron varios problemas sociales, principalmente la reducción de la fuerza laboral y el envejecimiento de la población. Más de 15 por ciento de la población tiene más de 60 años de edad y la población en edad de laborar ha empezado a disminuir.
China tiene más de 140 millones de mujeres en edad de tener hijos que ya han dado a luz a un hijo. Después de que la nueva ley sea adoptada, se espera que cerca de 90 millones tengan un segundo hijo, según Wang Pei’an, un subdirector de la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.
Los expertos no esperan que haya una explosión demográfica en los siguientes años porque no todas las parejas en edad de tener hijos está dispuesta a tener un segundo hijo, principalmente por los crecientes costos de la educación y de la crianza de los hijos.
Pero para que la nueva ley funcione adecuadamente deben haber mejores servicios públicos en ámbitos como el de educación, salud, empleo y seguros, dijo Han Xiaowu, un miembro del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional.