AGENCIAS
El catedrático del Tecnológico de Monterrey, campus Puebla, Alberto Tovar Castro, sugirió gastar el aguinaldo en prioridades.
Resaltó que “hacer un listado de necesidades en casa es una forma de fijar prioridades y hace posible que los recursos se pueden utilizar para otras cosas importantes”.
El aguinaldo es un derecho del trabajador que se gana todos los días que trabaja en el año, y que de acuerdo a la Ley Federal del Trabajo, este bono económico, por lo menos tiene que ser el equivalente de 15 días de pago de salario y debe de pagarse antes del día 20 de diciembre como fecha tope.
En un comunicado, indicó que en caso que el trabajador no cumpla el año, recibirá una parte proporcional.
Para el catedrático, la temporada decembrina se ve bombardeada de publicidad que incita a los trabajadores a gastar este ingreso, que bien administrado puede destinarse a mejores compras como el cambio de algún bien mueble dentro del hogar o incluso a la atención de la Salud, de achaques que no se han atendido por falta de dinero.
Tovar Castro mencionó que la única forma de dejar de gastar ante la avalancha publicitaria y entorno de compras de la época es a través de un presupuesto.
“El dar presentes genera una gran satisfacción; sin embargo, valdría la pena sopesarlo conforme al uso alternativo del recurso y ya estableciendo una gran cantidad máxima de dinero, ceñirse a ella, en función de los compromisos”, sugirió.
El especialista recomendó algunas “razones” para gastar mejor el dinero del aguinaldo. La primera forma sobre cómo destinarlo reside en que éste y los bonos que se otorgan en diciembre, no son ingresos extraordinarios; son parte del sueldo y deben ser considerados integralmente para cubrir las necesidades de todo el año.
La segunda manera es que hoy día existen personas que viven una crisis de liquidez en forma permanente y persiguiendo la quincena todo el tiempo, por lo que tener un monto de recursos como contingencia ayuda a evitarlo.
Tovar Castro especificó que la tercera razón que debe “poner a pensar” al consumidor antes de ponerse a gastar, es revisar los pasivos de corto plazo, como son las tarjetas de crédito o los adeudos fijados a la nómina, ya que sería una buena oportunidad para bajar saldos de deudas caras.
Sobre la incapacidad para ahorrar, dijo que ésta es otra razón para el destino del aguinaldo, ya sea a través del sistema bancario o entrando a algún fondo de inversión en una casa de bolsa. Incluso, puede ser la semilla para compras de mayor envergadura, como la adquisición de una casa o un auto.
Otro elemento, en el cual se puede destinar esa gratificación es contratar un seguro escolar y asegurar la educación universitaria de sus hijos.
“Esta es una manera de amarrar el ingreso y dejar de estar sujeto a la tentación de gastarlo; al pasar el tiempo verás que el esfuerzo tuvo sus frutos”, insistió.
El experto en finanzas destacó que la famosa cuesta de enero es inevitable y es fundamental hacer un cálculo de cuánto se requerirá para pasarla. Es frecuente que después de la “borrachera” de los gastos de diciembre, venga la cruda realidad de los pagos de inicios de año.
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