En abril del 2020 se registró una caída significativa de la población económicamente activa, principalmente porque muchos ocupados están suspendidos temporalmente por la cuarentena y no se encuentran en búsqueda activa de un empleo. Esta suspensión temporal podría incluir a los trabajadores que están parados sin percepción de ingresos y sin garantía de retorno a sus ocupaciones.
Simúltaneamente se presentaron incrementos en el nivel de desempleo y subocupación como consecuencia de la paralización y el quiebre de empresas y negocios. Como medida alterna a la ENOE (Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo) que se encuentra suspendida para contener la propagación del virus, el Inegi levantó la ETOE (Encuesta Teléfonica de Ocupación y Empleo).
- Aun cuando son resultados parciales, sí brinda un panorama general de los efectos de la pandemia en el mercado laboral.
- De acuerdo con las cifras recolectadas, la Tasa de Participación Económica se contrajo en 12.3 puntos en comparación inmediata, pasando de 59.8 a 47.5% de marzo a abril.
Esta situación implicó que cerca de 12 millones de mexicanos salieron de la población económicamente activa, principalmente por el aumento de la población que se encuentra suspendida temporalmente de sus ocupaciones sin ingresos ni garantía de retorno.
- La Tasa de Subocupación fue otro de los indicadores que presentaron un impacto importante de la crisis sanitaria; concentra a todos los ocupados que, aun teniendo un empleo, están en busca de uno adicional para completar sus necesidades económicas.
- La tasa incrementó de 9.1 a 25.4%, un salto de 16.3 puntos en sólo un mes. Durante abril la población subocupada pasó de 5 millones a 11 millones de trabajadores en relación con el mes previo.
Al mismo tiempo se registró un aumento considerable de 1.7 puntos porcentuales en la Tasa de Desocupación, que pasó de 3.0% en marzo a 4.7% en abril. El grupo más afectado fue la población de entre 25 a 44 años, que conforma cerca de la mitad del total de los desocupados en el país.
Los trabajadores más vulnerables
La Tasa de Informalidad Laboral registró una caída importante durante abril. La paralización de las actividades y el asilamiento social implicó un corte inmediato para los trabajadores de la economía informal, que además son los más desprotegidos.
La población trabajando en actividades no formales, sin registro en las instituciones de seguridad social, pasó de representar al 55.7% del total de trabajadores del país a el 47.7 por ciento.
Las razones
Gabriel Pérez del Peral, profesor de la Escuela de Gobierno y Economía de la Universidad Panamericana, señaló que la caída en la fuerza laboral tuvo que ver con el cierre de las cadenas de suministro y la caída en el turismo, lo que tuvo un fuerte impacto en el empleo.
Añadió que, “en tercer lugar, el paro de las actividades no esenciales en el país fue un factor muy importante y por último, el confinamiento de las familias mexicanas en su hogar hizo que se cayera el consumo interno, bajando la producción y afectando al empleo”.
“El efecto en el empleo por parte del coronavirus en México es catastrófico, y gran parte de la pérdidas de empleos es debido a que las medidas de apoyo por parte del gobierno mexicano fueron insuficientes para las microempresas para poder preservar el empleo”, mencionó Elías Micha, director de TallentiaMX, agencia experta en el mercado laboral.
- El Inegi añadió que la población ocupada pasó de 5.1 millones de personas en marzo de 2020 a 11 millones en abril del mismo año, equivalente a una tasa de subocupación de 25.4 por ciento.
- El valor en el mes de abril se traduce en un incremento de 5.9 millones de personas subocupadas, esto es, 16.3 puntos porcentuales más respecto a marzo.
- Mientras que la población desocupada, es decir, la que no tiene trabajo manifestando al mismo tiempo que realizó acciones de búsqueda de empleo, en abril de 2020 se estimó en 2.1 millones de personas, equivalente a 4.7 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA).
- Una tasa superior en 1.7 puntos porcentuales respecto al mes inmediato anterior y en 1.2 puntos porcentuales mayor a la de abril del año pasado.
En su reporte, el Inegi añadió que la población no ocupada con disponibilidad para trabajar, pero sin buscar activamente un empleo, pasó de 5.9 millones en marzo, a 20 millones de personas en abril, lo que equivale a un incremento de 24.5 puntos porcentuales.
Agregó que, “dichas personas, en su mayoría, están a la espera de volver a retomar sus actividades”.
De esta cantidad, 11.3 millones de personas dejaron de trabajar debido a la suspensión temporal de su trabajo sin recibir pago, ocasionado por la cuarentena.
En contraste, la Tasa de Informalidad Laboral se situó en 47.7 por ciento, cifra menor en 8 puntos porcentuales comparado con la del mes previo. En personas implicó una baja de 31 a 20.6 millones, 10.4 millones menos, de acuerdo con los resultados de la ETOE.
“El sector informal ha sido la alternativa para las familias mexicanas para obtener ingresos. Durante el paro de la economía, también ha sufrido de la pérdida de empleos por la emergencia sanitaria”, señaló María Ayala, coordinadora de investigación de Acción Ciudadana contra la Pobreza.
“La población informal salió del mercado de trabajo siendo ahora población no económicamente activa con disponibilidad para trabajar. Esta disminución también refleja la suspensión temporal de actividades y la espera de retomarlas”, aseveró el organismo.
Incierta, la prolongación del bache laboral: analistas
El confinamiento dejó sin esperanza de un empleo en lo inmediato a 12 millones de trabajadores del país –entre marzo y abril del 2020– para pasar en el mercado laboral de ser personas ocupadas a población inactiva, y aunque esta nueva composición puede ser pasajera; tampoco hay muchas posibilidades de un empleo, al menos hasta que no se reactive la economía y haya inversión, estimaron especialistas laborales.
- Guillermina Rodríguez, subdirectora de Estudios Económicos de Citibanamex, comentó que hay un incremento importante de trabajadores inactivos en el mercado laboral, pero ello muestra que muchas de las personas encuestadas no se consideran desempleadas, sino que suspendieron sus actividades de manera momentánea para quedarse en casa cumpliendo con las medidas de confinamiento que solicitó el gobierno federal.
- En ese sentido, añadió Rodríguez, muchos de ellos, que por el momento se desistieron de buscar empleo, mantienen la esperanza de regresar a trabajar, incluso en su mismo empleo, situación que dependerá de la reactivación que se vaya presentando según el semáforo epidemiológico que dará a conocer la Secretaría de Salud diariamente.
“Parte de la lectura que hacemos con la información que presentaron es que la población trabajaba bajo acuerdos de palabra; y en algunos casos por cuenta propia y tras el confinamiento decidieron retirarse del mercado de trabajo. Quizá sus actuales patrones o empleadores los llamen nuevamente a trabajar, o bien los que trabajan por cuenta propia retomen sus actividades una vez que salgan del confinamiento”.
Armando Leñero, presidente del Centro de Estudios para el Empleo Formal (CEEF), comentó que la actual radiografía que presentó el Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) demanda la participación de todos: gobierno, empleadores, trabajadores, especialistas; para que de manera conjunta se impulse el empleo formal.
Si bien se sumaron tres industrias como esenciales -minería, automotriz y construcción- hace falta “políticas claras de recuperación del empleo, no sólo del empleo que generará el gobierno, a través de los programas sociales, sino de empleo que cuente con todas las prestaciones laborales y con seguridad social.
- El Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico, comentó que estas condiciones de abril van a permanecer, en mayo “si consideramos que se han presentado reportes del Instituto Mexicano del Seguro Social y de la Secretaría de Trabajo informando que cerraron 6,000 patrones, es muy probable que el nivel de personas inactivas se mantenga”.
Añadió que el reporte del Inegi combina tres factores: incremento en desocupación, condiciones críticas de la ocupación y que todo se da con menores oportunidades laborales, “las personas dejaron de buscar empleo, es la condición menos favorable que se ha visto en la historia del país en los últimos 50 años”.
Además, a diferencia de otras crisis, la informalidad no resultó ser la válvula de escape para que los trabajadores del país se emplearan.
Tasa de desocupación en jóvenes dobla la tasa general en México: OIT
Las desigualdades persistentes en el mercado laboral son una de las principales problemáticas de México que, en medio de la crisis provocada por el Covid-19, se pronunciarán de manera importante.
- La población joven ya enfrentaba mayores desafíos para acceder al empleo en comparación con la población genera. En México la mitad de los desocupados pertenecen a un solo grupo, el de jóvenes de entre 15 a 29 años, mientras que la mitad restante se distribuye en tres grupos que engloban al resto de adultos jóvenes, adultos mayores y personas de la tercera edad, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del Inegi.
Esta situación se acompaña con una tasa de desocupación en jóvenes significativamente mayor que la tasa general. Con cifras actualizadas al primer trimestre del 2020, se observó que mientras 3.4% de la población económicamente activa total está desocupada, para los jóvenes económicamente activos la tasa asciende hasta el 6.0 por ciento.
- Durante la última semana de mayo la Organización Internacional del Trabajo (OIT) alertó sobre esta problemática a escala global, especialmente agravada por la emergencia sanitaria. En el mundo 1 de cada 6 jóvenes menores de 29 años en edad de trabajar se desocupó a consecuencia de la pandemia y aquellos que pudieron conservar sus empleos han experimentado reducciones en sus ingresos laborales, reportó en su informe.
- La OIT enfatizó en la importancia de tomar medidas con perspectivas sociales, que consideren que el impacto de la crisis por el Covid-19 no es equitativo y actúe con políticas que protejan a los grupos vulnerables, los jóvenes dentro del mercado laboral.
En México, está problemática es aún más compleja si se clasifica la población joven por estrato socioeconómico. En el país hay 890,416 jóvenes menores de 29 años en edad de trabajar, de los cuales el 64.5% (632,468) pertenecen a los estratos socioeconómicos bajos y medios bajos.
Otra de las problemáticas dentro del mercado laboral es la subocupación, que también afecta de manera desproporcionada a los jóvenes. En este rubro se coloca a toda la población que, aunque sí tiene una ocupación, está en busca de una adicional para completar sus necesidades económicas o de tiempo.
Los nuevos esquemas laborales conocidos como “freelance” o “gig economy” podrían encajar en este rubro y la mayoría de la población ocupada en empleos de este tipo son jóvenes o adultos jóvenes.
Siguiendo las cifras de la ENOE, durante el primer trimestre del 2020, una cuarta parte (25%) de los subocupados son jóvenes menores de 29 años en edad laboral y otro 23% son adultos jóvenes de entre 30 y 39 años./Agencias-PUNTOporPUNTO
Documento íntegro:
ETOE
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