El 15 de mayo de 2019, el presidente Andrés Manuel López Obrador celebró la aprobación de la reforma educativa impulsada por su gobierno, en la que –entre otras cosas– se estableció la obligatoriedad de los niveles inicial y superior. “La educación no es un privilegio, es un derecho del pueblo; el Estado tiene la obligación de garantizar que sea pública y gratuita en todos los niveles escolares”, dijo en conferencia de prensa.
- A más de dos años, la reforma no se ha traducido en mayor presupuesto para cumplir con la premisa y el costo de darle obligatoriedad a los niveles inicial y superior equivaldría a dos veces el monto del Tren Maya, uno de los proyectos prioritarios del gobierno actual, estimado en 200,000 millones de pesos.
- De acuerdo con un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) unos 15.7 millones de mexicanos en edad de estudiar no están en las aulas y para ello, el país requiere 440,000 millones de pesos para integrar a esta población que no asiste a la escuela, 28,042 pesos por estudiante, lo que equivalente al 1.7 % del Producto Interno Bruto (PIB).
Pero para el próximo año, tampoco se prevén recursos suficientes para lograr esos objetivos que planteó la reforma educativa, pues en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2022, se prevén 161.9 millones de pesos para la Estrategia de educación inicial, 2,525.5 millones para la obligatoriedad y gratuidad de educación media superior, y 753 millones para la obligatoriedad y gratuidad de educación superior, lo que representa solo el 0.8% de los recursos necesarios para integrar a las personas a su nivel educativo correspondiente.
“Todos los recursos que va a destinar el gobierno para 2022 para lograr el objetivo de ampliar la cobertura, únicamente representa el 0.8% de todos los recursos necesarios par integrar a las personas a su nivel educativo correspondiente. Ni siquiera el 1% se está destinando para cumplir los objetivos que el mismo gobierno se está proponiendo, lo que nos parece muy grave”, señala Francisco Alberto Pérez Pacheco, autor del análisis “Educación para todos: una tarea pendiente”.
«Para 2022, apenas vimos que se destinaron recursos para lograr los objetivos de la reforma Educativa de 2019». Francisco Alberto Pérez Pacheco, investigador de CIEP.
El especialista explica que los recursos que se requieren servirían para integrar a quienes no están inscritos actualmente, pero con las condiciones actuales, es decir sin mejoras ni cambios tras las deficiencias que mostró la epidemia de COVID-19.
- Las estimaciones del CIEP contabilizan a 8.8 millones de personas de entre cero y 17 años que no están inscritos en los niveles educativos que les corresponde según su edad, lo que requeriría de 188,442 millones de pesos (0.7% del PIB) para integrarlos y a 6.8 millones de personas que están en la edad típica de estudiar el nivel superior, que si se inscribieran en alguna institución de educación pública, necesitarían 252,313 mdp (0.9% del PIB) adicionales millones para poder incluirlos.
- A su vez, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía reportó que 5.2 millones de estudiantes que dejaron las aulas en el ciclo escolar pasado. De estos, un 26.6% lo hizo porque sus familias consideraban que las clases a distancia son poco funcionales para el aprendizaje; un 25.3% debido a que alguno de sus padres o tutores se quedaron sin trabajo y un 21.9% reportó no inscribirse por carecer de computadora o algún otro dispositivo electrónico o contar con conexión a internet.
Por lo que, Pérez Pacheco destaca que para 2022 se prevé destinar el 1.9% más de recursos de lo presupuestado el año pasado, lo que es insuficiente para dotar de infraestructura sanitaria adecuada para el regreso a clases seguro, integrar a los alumnos que se sumaron con la reforma de 2019 y ofrecer educación de calidad, como lo marca la legislación de hace tres años.
“Se va a aprobar más presupuesto, pero tal vez no se vaya a los sectores donde se requiere. El llamado es dar estos recursos de 440,000 lo que sería únicamente para garantizar el derecho a la educación; sin embargo, hay todavía muchos desafíos en el sector que no están siendo atendidos”, comenta en entrevista.
Para el especialista, México aún está lejos de cumplir con la propuesta del Ejecutivo federal de dar educación para todos y de calidad, pues aunque está en la Ley, no se ha traducido en más recursos y apoyos para integrar a quienes no están en las aulas./EXPANSIÓN-PUNTOporPUNTO
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