AGENCIAS
Eduardo Medina Mora, quien fue electo este martes nuevo ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), sostuvo ante senadores que su “único compromiso es con la Constitución y con México”.
Al comparecer ante el pleno del Senado como parte de la terna que envió el presidente Enrique Peña Nieto para ocupar una vacante en la SCJN, dijo que es sensible a las críticas que se han hecho sobre su persona pero no las comparte.
Sostuvo que tiene la convicción de que la legalidad es la clave para fortalecer a las instituciones del Estado mexicano, y que desde 1994 la corte se ha convertido en garante del orden jurídico nacional.
Ante los legisladores, destacó que entre los retos de la SCJN están dar certidumbre y seguridad jurídica a todos los ciudadanos.
Asimismo defendió su actuación en la Procuraduría General de la República (PGR), la Secretaría de Seguridad Pública, como director del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y como embajador ante Estados Unidos.
Ante cuestionamientos previos que hicieron senadores del PRD y PT, explicó cuál fue su actuación ante diversos casos, entre ellos el operativo contra el tráfico de armas denominado Rápido y Furioso que implementaron autoridades de Estados Unidos.
Medina Mora subrayó que su actuación ante casos controvertidos siempre fue de buena fe y apegado a la legalidad, y recalcó que de ser nombrado ministro de la Suprema Corte velaría por el respeto irrestricto a los derechos humanos y a la Constitución.
En su oportunidad, Horacio Armando Hernández Orozco indicó que la situación del México actual representa un gran reto, con un nuevo paradigma en los derechos humanos y la implementación de un nuevo sistema judicial.
Durante su comparecencia ante senadores, antes de que fuera electo Medina Mora como nuevo ministro de la SCJN, aseveró que su actuar sería en todo momento en apego a la letra de la carta magna.
Realizó una semblanza de su vida en un México con coyunturas políticas y culturales que le han aportado principios y valores fundamentales para su labor como defensor de la Constitución.
A su vez Felipe Fuentes Barrera externó su interés por atender a plenitud la impartición de justicia como ministro y, con ello, implementar y fortalecer a la SCJN desde su seno, para colaborar por un Estado de derecho en beneficio de la sociedad mexicana.
Subrayó que su candidatura la basaba en dotar al Poder Judicial de herramientas tecnológicas y jurídicas que permitan el acercamiento con la sociedad, y con los trabajos constitucionales en materia jurídica para eficientar las acciones de quien tiene como facultad la procuración de justicia en correlación con la Corte.