El mayor aliado de Assad aguarda represalias. El Presidente de Rusia, Vladimir Putin, condenó ayer el “acto de agresión” de Estados Unidos y sus aliados contra Siria, pero no lanzó amenazas al respecto. El Mandatario cuestionó que el bombardeo se lanzará por un supuesto ataque químico aún no comprobado y destaco los daños causados. Especialistas militares expresaron que la respuesta parece evidenciar la satisfacción de Moscú de que el ataque del viernes no cruzo “la línea roja” que impusieron de no agredir directamente al régimen del Presidente sirio, Bashar al-Assad./REFORMA