RITA MAGAÑA TORRES
El secretario del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Juan José Guerra Abud, informó que la próxima semana se dará a conocer los resultados de la inspección en las instalaciones de la mina Buenavista, de Grupo México, responsable del derrame de 40 mil litros de sulfato de cobre en los ríos Sonora y Bacanuchi, en Sonora.
“La sanciones cuáles van a ser, no se las puedo precisar, necesitamos acabar de medir con precisión todas las consecuencias, todo lo que pasó y en función a eso, créanmelo, se va a actuar con estricto apego a la ley», dijo.
Señaló que el lunes o martes de la siguiente semana y con base a los estudios que hacen los peritos, se pueda emitir un dictamen y opinión sobre los hechos ocurridos, a fin de tomar las medidas procedentes.
En entrevista, luego de asistir a la conferencia magistral que ofreció Joan Clos, director Ejecutivo de ONU-Hábitat, en el Senado, el funcionario federal señaló que hay varias leyes que se revisan no solamente la de Gestión de Residuos, sino también la del Agua o la de Responsabilidad Ambiental.
Recordó que personalmente el procurador Federal de Protección al Ambiente, Guillermo Haro, encabeza la revisión de los trabajos que realizaba la mina y la documentación que ampara sus operaciones.
Destacó que el actual gobierno federal ha supervisado 300 de los más de mil 300 sitios de explotación minera en el país, de lo que han derivado 20 clausuras.
«Vamos a intensificar la supervisión de las minas, pero con el firme propósito de fortalecer esta industria. No podemos satanizar una industria por lo que pasó en una empresa o en una explotación en particular”, precisó.
Sobre si la mina ya había sido investigada, Guerra Abud respondió que no la habían revisado, sino hubieran detectado los problemas.
Sin embargo, señaló que la minería es una industria importante para el país, por lo que no se puede satanizar al sector, porque la gran mayoría de las empresas están actuando respetando las normas ambientales.
En la presentación de la Conferencia Magistral del Director Ejecutivo de ONU-Hábitat, Joan Clos, Guerra Abud destacó que el reto que enfrenta la humanidad es el cambio climático, pues los efectos meteorológicos extremos provocados por este fenómeno cada día son más frecuentes e intensos.
Dijo que México debe asumir una responsabilidad global ante este escenario, porque su posición geográfica lo hace uno de los países más afectados por el calentamiento del planeta.
Por ello, añadió que nuestro país mantiene una posición de liderazgo a nivel internacional para mitigar los efectos del cambio climático, no obstante que es un pequeño emisor de gases invernadero.
Recordó que en 2010 emitimos 748 millones de toneladas de CO2 y de esta cifra casi el 25 por ciento se le atribuye a las edificaciones. De ahí la importancia de que los congresos emitan mandatos de ley para mejorar la vivienda y la condiciones de vida de la población.
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