Las autoridades investigan la desaparición de 11 jornaleros, que el pasado domingo 3 de mayo salieron del municipio de Choix, en Sinaloa, hacia Hermosillo, Sonora, donde presuntamente trabajarían en la cosecha de uva.
Los 11 desaparecidos son: Luis Enrique Rosas Berrelleza, de 22 años; Édgar Adrián Rosas Berrelleza, de 20; los hermanos Santiago y Miguel Omar Berrelleza Izaguirre, de 25; Arturo Merino Berrelleza, de 21; Jesús Aguirre, de 26; Jesús Hernán Antelo, de 36; Gabriel Berrelleza, de 38; Jesús Gastélum, de 3, y los hermanos José Everardo y Abel Antonio Lastras Berrelleza, de 15 y 19.
Fue hasta el pasado miércoles 6 de mayo cuando el familiar de uno de los jornaleros desaparecidos acudió ante el Ministerio Público para denunciar la desaparición; sin embargo, no aportó mayor información, de acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado de Sonora (PGJE).
El titular de la procuraduría sonorense, Carlos Navarro Sugich, indicó que lo único que saben hasta ahora es que el grupo de jornaleros salió alrededor de las 8 de la mañana del 3 de mayo de Choix hacia Hermosillo a bordo de una camioneta pickup Chevrolet, con placas de circulación UD25401, de acuerdo con un reporte de Riodoce.
“No sabemos en qué momento se perdieron estos jóvenes, no sabemos en qué momento dejaron de tener contacto con sus familiares; todavía estamos en la integración de la averiguación respectiva y espero que podamos esclarecer pronto esta triste situación”, dijo el procurador el pasado 7 de mayo.
En la reunión del pasado lunes 11 de mayo con el alcalde de Choix, Juan Raúl Acosta Salas, familiares de los jornaleros desaparecidos señalaron que la última información que tienen es un mensaje de texto que envió uno de ellos para avisar que ya estaban en Guaymas, Sonora.
“(Édgar Adrián Rosas Berrelleza) Se despidió de mí y se subió. Fue la última vez que lo vi. No sé lo que le pasó. Su celular suena, pero nadie contesta, y en ocasiones lo apagan. Él ha salido otros años a ese mismo corte de uva y siempre mensajea con los que nos quedamos en el pueblo. Hoy no. No habla, nada, nada”, dijo ese día su esposa, Dora Delia Palma Gil.
“Sólo sé que iba al corte de uva y que no sabemos nada de él”, señaló Jesús Izaguirre Osorio, padre de uno de los jóvenes desaparecidos, quien agregó que su hijo no llevaba celular porquie era muy pobre.
Durante la reunión con las autoridades, todos los familiares indicaron que el grupo de jornaleros sabía que la camioneta en la que viajaban cruzaría brechas para evitar el pago de casetas y llegar más rápido a su destino; sin embargo, nadie conocía bien el trayecto, sólo sabían que iban en busca de trabajo.
“Siempre era lo mismo, con la misma mujer, el mismo trato, y siempre regresaron con bien, pero hoy no sabemos nada de ellos”, dice don Pedro, padre de otro de los desaparecidos.