El Consejo General del INE ratificó el pago de 7.7 millones de pesos que la empresa Dish hizo a Televisa y a Televisión Azteca por los costos de producción de la pauta federal que transmite desde el 5 de abril pasado y que concluirá el día de la jornada electoral.
Lo anterior, luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revocó parcialmente la sentencia aprobada por el INE y le ordenó un nuevo acuerdo que sustentara los criterios por los que la empresa de televisión restringida debía pagar por una pauta federal.
El acuerdo se aprobó por mayoría tras un largo debate generado luego de que se informó que hoy llegaron dos escritos, uno de Televimex y otro de Dish, en los que ambas empresas formulan un conjunto de manifestaciones que pidieron fueran tomadas en cuenta por el Consejo General.
El colegiado también aprobó que se incorporaran los documentos supervinientes que llegaron de Dish y Televimex en los considerandos del acuerdo y que se hiciera referencia a la respuesta en los mismos.
En su intervención, el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello dijo que justo cuando el consejo tenía que dar cumplimiento al acatamiento, Dish respondió que siempre sí se quedaba con algunos de los planteamientos puestos en la mesa de negociación y que en su momento rechazó.
Indicó que el proyecto de resolución presentado hoy al Consejo General, de facto da respuesta al nuevo documento presentado por Dish en los términos considerativos, aunque previamente no se conocía el texto en sus términos.
Por ello, dijo no ver inconveniente para que el documento de Dish fuera incorporado al proyecto como también el de Televimex, el cual menciona que ya hizo inversiones atendiendo el acuerdo del Consejo General, por lo que atender la propuesta de Dish le generaría un daño irreparable.
“Técnicamente no estamos obligados a incorporar para acatar la sentencia del tribunal, pero no hay nada que jurídicamente implique no atenderlos porque no estamos variando el sentido del proyecto, que de facto da respuesta al documento entregado con posterioridad por Dish”, dijo.
En tanto, el consejero Ciro Murayama Rendón consideró que toda vez que los escritos recibidos no forman parte del acatamiento que mandató el tribunal electoral, no deberían formar parte del mismo porque se les debe dar respuesta por separado.
El tribunal, expuso, instruyó para que “nosotros desplegáramos unas reglas para la negociación y en caso de no haber acuerdo de entre las distintas opciones que se tenían viésemos cuál era la más conveniente, es decir, nos instruyó a desarrollar a futuro una cosa”.
En su intervención, la consejera Pamela San Martín dijo que lo que plantea Dish es algo a lo que ya se le da respuesta en el acuerdo, pero el problema es de certeza, pues no se debe caer en un exceso de cumplimiento de una sentencia.
A su vez, el consejero Enrique Andrade González dijo que pareciera una estrategia jurídica que “el día que resolvemos el asunto llega una petición de uno de los sujetos regulados, lo que igual sucedió cuando se ordenó que se diera una pauta federal y que Dish pagara por ello a Televisa y TV Azteca”.
Por su parte, el consejero Javier Santiago Castillo consideró que el Consejo General no tenía atribución para incluir elementos nuevos, por lo que la respuesta puntual deberán darla los remitentes a quienes se dirigieron las cartas.