AGENCIAS
Miguel Herrera anunció el miércoles la renovación del contrato para seguir al frente de la selección de México por los próximos cuatro años.
El «Piojo» Herrera asumió las riendas de México para disputar el repechaje que con el que consiguió la clasificación a la Copa Mundial de Brasil 2014 a través del repechaje. Tenía un convenio por un año con la Federación Mexicana de Fútbol, que expiraba este mes.
La renovación era un formalismo que estuvo en espera los últimos meses. Herrera había adelantado que ambas partes tenían un acuerdo verbal, pero que aún faltaban detalles menores para formalizar el contrato.
«Hicimos un buen arreglo con la gente de la federación. Llegamos a un acuerdo muy bueno y estamos muy contentos ya con el contrato firmado», dijo Herrera durante un evento en el que develó sus huellas en una plaza comercial de la capital.
El entrenador declinó dar detalles sobre el monto del contrato y sólo mencionó que es por cuatro años. El vínculo lo mantendría al mando del «Tri» hasta el Mundial de Rusia 2018.
«No se puede saber el monto, pero fue un buen arreglo para los dos», dijo.
El «Piojo» Herrera será el primer entrenador del «Tri» en continuar con un proceso tras un Mundial desde Manuel Lapuente en Francia 1998. Lapuente se mantuvo al frente del equipo, pero renunció poco después.
Luego de vencer a Nueva Zelanda en el repechaje mundialista, México avanzó a la segunda ronda en Brasil 2014 y estuvo en ventaja 1-0 ante Holanda hasta los 87 minutos en el choque de octavos de final. Pero los europeos le dieron la vuelta al marcador y dejaron fuera a México.
Fue la sexta vez seguida que México se despidió de una Mundial en esa ronda.
Herrera recibió el beneficio de la duda de parte de los dirigentes mexicanos al considerar que apenas tuvo seis meses para preparar al seleccionado.
Tras el Mundial, Herrera siguió trabajando y dirigió en seis partidos amistosos con miras a un ajetreado año 2015 en el que enfrentará la Copa América en Chile y la Copa de Oro en Estados Unidos.
México, que perdió en las semifinales de la pasada edición de la Copa de Oro, está obligado a ganar el título para poder pelear el derecho de disputar la Copa Confederaciones de 2017.
«Hay que dar resultados para estar acá, sabemos que lo principal es la clasificación al Mundial, pero en el intermedio tenemos dos torneos en los que tenemos que dar resultados para mostrar que queremos seguir», afirmó Herrera. «Ganar la Copa de Oro es una obligación».
Para la Copa América, Herrera ha dicho que la meta es alcanzar la final.
«Ganarla es difícil, pero vamos a intentar llegar a la final, esa es la idea», añadió el estratega, quien para esa competencia no podrá contar con los jugadores que militan en clubes europeos por mandato de la CONCACAF. «No es un equipo B, es la selección mexicana».
En la Copa América de Argentina 2011, México llevó un equipo con restricción de edad, reforzado con tres veteranos, y perdió los tres partidos de la primera fase para hundirse en el último puesto del certamen por primera vez desde que los mexicanos comenzaron a ser invitados en Ecuador 1993.