El banco central de Brasil ordenó el cierre de la unidad local del Banco Azteca SA, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, luego de que las finanzas erosionadas y el incumplimiento de normas de la industria la llevaron a sucesivas pérdidas.
En un comunicado emitido el viernes, el banco central brasileño dijo que la deteriorada situación de Banco Azteca do Brasil SA dejó a depositantes y acreedores expuestos a riesgos «anormales». Azteca do Brasil tenía una única sucursal en funciones y poseía el 0.0005 por ciento de los activos bancarios de Brasil y el 0.0009 por ciento de los depósitos totales.
El banco central está «tomando las medidas adecuadas para evaluar las responsabilidades», agregó el comunicado.
Salinas Pliego, cuya fortuna ha sido estimada en cuatro mil 500 millones de dólares por la revista Forbes, abrió la unidad local de Azteca en la ciudad de Recife en 2008, como parte de sus planes de expandir su cadena minorista Grupo Elektra SAB en el noreste de Brasil.
Pero en los últimos años, el gasto de los consumidores en la región alguna vez en auge comenzó a perder impulso, perjudicando tanto a Elektra como a Banco Azteca.
La decisión llega en momentos en que el banco central de la mayor economía de Latinoamérica está ajustando el control sobre las firmas bancarias y de correduría, en medio de la peor crisis industrial local en casi dos décadas.
Los bancos de Brasil están luchando para capear la recesión más profunda de la nación en por lo menos un cuarto de siglo, ante crecientes costos de endeudamiento y un escándalo de corrupción en compañías estatales que generó una ola de renegociación de préstamos y cesaciones de pago.
Banco Azteca opera en cinco países de América Latina. Los llamados a la entidad en Recife en busca de comentarios no fueron respondidos de inmediato.
Según el comunicado, el 68 por ciento de los depósitos en Banco Azteca do Brasil están respaldados por el fondo de garantía FGC, una institución privada financiada por bancos que operan en el país sudamericano.