La policía brasileña detuvo hoy al presidente de la mayor constructora de Brasil y de América Latina, Marcelo Odebrecht, en el marco de una nueva fase de investigaciones sobre los desvíos y la corrupción en la estatal Petrobras.
El presidente de la Constructora Odebrecht, fue detenido al lado de Otavio Marques Azevedo, presidente de otra enorme constructora brasileña, Andrade Gutiérrez.
Agentes de la policía entraron a las 06:00 horas locales (09:00 GMT) a la sede de Odebrecht en Sao Paulo, donde se hicieron con documentos e informaciones sobre sus eventuales vinculaciones con los desvíos de dinero desde Petrobras para obtener contratos de suministro.
“Tenemos que castigar a todos los responsables. Esto es una República, la ley debe de valer para todos, o no debería valer para nadie”, dijo hoy el fiscal Carlos Fernando dos Santos Lima en rueda de prensa.
Acusó a las constructoras de “formación de cartel y de fraude en licitación” durante más de una década.
“Odebrecht y Andrade Gutierrez lideraban el cartel”, aseguró el fiscal, en referencia a la veintena de empresas constructoras que habrían participado en el desvío de fondos desde la estatal petrolera a cambio de hacerse con los contratos de licitación.
El comisario Igor Romário de Paula, quien participó también en la rueda de prensa, explicó que las autoridades investigan transacciones financieras sospechosas de ser pago de propinas en cuentas bancarias de Suiza, Mónaco y Panamá.
También dio detalles acerca de la magnitud de la supuesta corrupción en la que habrían participado las dos constructoras.
“Andrade Gutiérrez firmó contratos con Petrobras por valor de nueve mil millones de reales (tres mil millones de dólares) y Odebrecht por valor de 17 mil millones (más de cinco mil 600 millones)”, señaló.
“Si tenemos en cuenta que, como dicen los confesores, se pagaba 3.0 por ciento de comisión a partidos políticos y ejecutivos de Petrobras, la cifra desviada puede ser de 210 millones de reales (setenta millones de dólares] y 510 millones de reales (170 millones de dólares], respectivamente”, dijo el comisario.
Esta es la decimocuarta fase de la Operación Lava Jato (“Operación Limpieza”, en portugués), que investiga el desfalque de cientos de millones de dólares desde la petrolera estatal a través de sobrefacturación de contratos y comisiones.
En curso desde abril de 2014, la Operación Lava Jato fue considerada por el fiscal general de Brasil como el mayor caso de desvío de dinero de la historia del país.
Decenas de empresas y ejecutivos ya fueron imputados, mientras 54 políticos –entre ellos los presidentes del Congreso y del Senado- están siendo investigados por su supuesta implicación.