AGENCIAS
Los avances legislativos en derechos humanos de los últimos años han sido importantes, pero ahora se debe pasar a la “precisa aplicación” de todos los mecanismos de defensa en la materia, subrayó el procurador Jesús Murillo Karam.
“Es innegable la enorme transformación del derecho mexicano en cuanto a instituir y crear mecanismos más adecuados para la protección de los derechos humanos”, enfatizó el titular de la Procuraduría General de la República (PGR).
Sin embargo, admitió que “estamos en la etapa que tenemos que pasar del avance legislativo al avance preciso de la aplicación de todos estos mecanismos que buscan ponernos en la punta internacional de la defensa de los derechos humanos”.
Durante la inauguración del 152 periodo extraordinario de sesiones de la CIDH, el abogado de la nación dijo que las leyes en la materia recién creadas han dado mayor potencial a los acuerdos internacionales.
También se ha generado capacidad de interpretación a los jueces “para que puedan ir de manera más sencilla acomodando en una sola vía la ley y la justicia”.
“No es fácil cuando la rigidez del derecho impide que se determine la validez de la justicia y de la ley. No es fácil cuando se sobrepone una a la otra”.
Cuando el concepto de “dura lex sed lex” está por encima de todo y se olvida de la justicia, es el inicio de un estado totalitario y autoritario, recalcó el titular de la PGR.
Es fundamental, dijo, que en la construcción de la ley, se determine la posibilidad de la justicia para que ambos tengan caminos paralelos, “para que ambos resulten de un mismo propósito que no es complicado”.
Murillo Karam enfatizó que las leyes y la infraestructura para la aplicación de las nuevas leyes que protegen los derechos humanos, es un más sencillo que “modificar lo más difícil, lo más complicado y el trabajo que hoy tenemos: La mentalidad” con la que trabajan todos los actores involucrados.