Los niños en edad escolar son, tal vez, los más afectados por las políticas racistas del presidente de los Estados Unidos, el bravucón Donald Trump. Los menores mexicanos deportados enfrentan obstáculos para reinsertarse en el sistema educativo pues algunos tardan años en revalidar sus estudios.
Estos niños pueden, además, entrar tardíamente a la escuela y tener dificultades para integrarse por el desfase entre la temporalidad de la movilidad geográfica y los ciclos escolares, la adaptación al nuevo entorno que enfrentan las familias migrantes, la ausencia de documentos y la falta de dominio del idioma español.
Según datos del Colegio de la Frontera Norte, alrededor de 115 mil menores entre 5 y 17 años de edad retornaron a México entre 2010 y 2016, y para este año se espera que la tasa suba considerablemente. La educación básica los recibe, y aunque las tasas de asistencia escolar en primaria y secundaria son mucho más altas, cuando pasan a preparatoria un 40 por ciento no continúa.
Se sabe por registros docentes que el problema se suscita precisamente en el pase de la educación básica a medio superior, en ese punto se rompe esta dinámica y posteriormente hay un quiebre total de la preparatoria a la universidad por la falta de papeles o de revalidación.
Uno de los obstáculos que en el pasado frenaba los estudios de cientos de menores era la falta de la Clave Única de Registro de Población (CURP). Sin esa matrícula, los escolares no solo no pueden revalidar sus estudios, sino que hace imposible su admisión a planteles de ciudades fronterizas.
Hace algunas semanas el Congreso de la Unión aprobó de manera urgente una reforma de ley que permite revalidación en un tiempo récord, pero lamentablemente gran parte de esta legislación sigue en papel. Su aplicación aún no llega totalmente a ciudades fronterizas, cuyas autoridades educativas no conocen los detalles y mantienen engorrosos trámites burocráticos.
Se ha avanzado en la materia a nivel nacional, ya que comienza a sensibilizarse a maestros y administrativos de planteles educativos y se simplificó la entrega de CURPs, pero hace falta mayor difusión de los programas y beneficios recientemente aprobados.
Urge que autoridades educativas locales entiendan de la importancia de insertar a los chicos en la escuela y darles seguimiento; recordemos que no solo llegan niños de los Estados Unidos, también jóvenes universitarios, y tenemos 32 universidades en el país, muchas de ellas autónomas, que normalmente tardan en enterarse de los cambios legislativos.
PARA EL REGISTRO Y siguiendo con el tema, nos cuentan que en la reciente platica que el canciller mexicano Luis Videgaray sostuvo con el secretario de Seguridad Interna de los Estados Unidos, John Kelly, el tema de deportaciones de mexicanos que no son “bad hombres” fue una prioridad; sin embargo, nos dicen también que no hubo avance alguno en la materia por lo que la política racista del régimen fascista continuará contra todos. Gracias y buen fin de semana.
@betata75
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