Sin duda el mega aumento a la gasolina el primer minuto de este 2017 hará mella en la población. Las redes sociales se inundan de información real y exagerada de lo que podría pasar por esta brutal alza al combustible, una medida mal calculada por el equipo de gobierno de Enrique Peña Nieto y que definitivamente dará al traste con su incipiente popularidad.
Dos fuentes confiables cuentan a esta columna que en reuniones de principios de diciembre de asesores de la Secretaría de Hacienda con personajes de alto nivel de Los Pinos, se acordó dar hasta el último momento lo que ya desde mediados de año se sabía; que la liberación del precio y el retiro del subsidio representaría un incremento sustancial, con todo y el costo político que ello acarrearía.
Ahí se decidió destapar la cloaca al cuarto para las doce. En esos cónclaves se esgrimieron todos los cálculos, pero en especial los políticos, e importándoles poco el golpe a la economía de las familias mexicanas se centraron en proteger la imagen del Gobierno Federal.
Se decidió dar la noticia a la población lo más tarde que se pudiera para aminorar el golpe mediático hacia el mandatario y evitar la especulación por parte de empresarios gasolineros.
Pero ni una cosa ni la otra les funcionó. Cuando la reforma energética fue anunciada con bombo y platillo en 2013 —reforma que dicho sea de paso llego demasiado tarde—, el gobierno repitió hasta el cansancio que no habría más aumentos a la gasolina y que al contrario, con la liberación incluida en dichos cambios legislativos bajaría su precio y se estabilizaría.
Ninguna estrategia que pudieran pensar estos sesudos asesores de “alto nivel” podría borrar toda aquella campaña mediática que ahora pulula en contra de la administración, y que promete incendiar a la opinión pública de todos niveles conforme avancen los primeros días del año.
Lo peor, tampoco se frenó la especulación, ya que datos de esas reuniones fueron filtrados a prominentes concesionarios gasolineros, quienes retuvieron el hidrocarburo, provocando un severo desabasto en más de la mitad de los estados del país en los últimos días del año.
Lo que debemos preguntarnos aquí es… ¿qué pasará con la población ante un inminente aumento generalizado de productos básicos, sobre todo en transporte urbano y foráneo, carne de res, tortilla, leche, taxis y arroz, insumos a los que impactará en primera instancia?
¿Qué rol jugarán las redes sociales para organizar a la sociedad en un tema trascendental, sobre todo en la clase media y alta indignada por tanto tema de corrupcion? ¿Qué falta para que las cosas empiecen a cambiar en este país si ya pasó de todo y no hemos hecho nada?
PARA EL REGISTRO Y ahora que recuerdo, en todo este embrollo que no solo es culpa del Gobierno Federal ¿dónde están los dirigentes partidistas, esos personajes que compraron esta farsa? Cobijados aún en las fiestas decembrinas, ni pío dicen *** Más allá de que Donald Trump sea o no un buen presidente de los Estados Unidos, los migrantes en el vecino país la están pasando mal. Un reporte de la organización Southern Poverty Law Center ha documentado mil 94 incidentes de odio desde que el magnate comenzó campaña política. De éstos, 315 son relacionados al tema migratorio: 152 fueron hacia personas por su origen latino, 134 por sentimientos antiárabes y 64 por un perfil asiático. Ni hablar, lo que hace la ignorancia y el poder. Gracias, Feliz Año Nuevo y hasta mañana.
@betata75
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