En las últimas horas se ha desatado en redes sociales una intensa discusión en torno a lo que puede ser una nueva narco-conspiración sobre la muerte de Juan José Esparragoza Moreno, alias El Azul.
El recién capturado hijo de uno de los líderes del cártel de Sinaloa ha declarado a las autoridades que efectivamente su padre ha muerto, como se presume, pero su afirmación parece no ser suficiente para acabar con los rumores de que el capo de la droga todavía está vivo y bien.
Las redes sociales se han encargado de alimentar la cuestión, y los internautas aseguran que con lo dicho por el hijo del capo se puede construir fácilmente las próxima gran narco-conspiración de México, como ya ha pasado.
Al rendir su declaración preparatoria ante un juez federal, José Juan Esparragoza Jiménez, alias El Cora, quien fue detenido el 20 de agosto pasado en Culiacán, Sinaloa, aseguró que sí es hijo del narcotraficante Juan José Esparragoza Moreno, aunque las autoridades federales no pudieron confirmar el parentesco ante la inexistencia de muestras genéticas del capo que permitan realizar el cotejo.
El Cora se declaró no culpable de los cargos de tráfico de drogas, pero insistió ciegamente que él es el hijo del «difunto» Esparragoza Moreno.
Como se sabe, a ambos personajes se les acusa de pertenecer al Cártel de Sinaloa, que produce metanfetaminas, cocaína y marihuana que se envía en grandes cantidades a los Estados Unidos.
Se ha manifestado que El Cora es el hijo menor de El Azul de su segundo matrimonio, aunque la Procuraduría General de la República todavía tiene que verificar esta afirmación.
Pues bien, la noticia que se dio a conocer es que El Azul había muerto de un ataque al corazón mientras se recuperaba de un accidente de coche acaecido el pasado mes de junio, pero su muerte aún no ha sido confirmada oficialmente, y los rumores de que está vivo persisten.
Tras la captura de Joaquín El Chapo Guzmán en febrero, El Azul se convirtió en uno de los dos líderes restantes del Cártel de Sinaloa –junto con Ismael Zambada García, alias El Mayo— una posición que sin duda aumenta la presión de las fuerzas de seguridad.
Fuentes aseguran que debido a su envejecimiento, es factible que El Azul haya decidido fingir su muerte, en parte para aliviar la presión de los largos años de ser un traficante de drogas, o simplemente para adelantar su jubilación.
Pero si bien estos no son más que rumores, la supuesta muerte de El Azul podría convertirse en la más reciente adición a una serie de teorías de conspiración narco-similares, de las que al menos una resultó ser cierta.
Como se recordará, la primer historia original de un capo de la droga de fingir su muerte implica al legendario Amado Carrillo, conocido como el Señor de los Cielos por su flota de aviones.
La supuesta muerte de Carrillo en 1997 a partir de una reacción a la anestesia después de someterse a una cirugía plástica nunca ha sido aceptada por muchos. Los rumores han sido alimentados por sucesos extraños, como el brutal asesinato de los cirujanos que lo operaron.
Desde entonces ha habido rumores de varias otras muertes falsas, entre ellos el de la pareja de El Azul en el Cartel de Sinaloa Ignacio Coronel Villarreal, alias Nacho Coronel, quien supuestamente murió en julio de 2010, pero que también se rumora que está vivo y bien.
Aunque la verdad de la mayoría de estas historias probablemente nunca se conocerá, en el caso del narcotraficante mesiánico y fundador de La Familia Michoacana, Nazario Moreno González, alias El Chayo, las teorías de la conspiración resultaron ser todas ciertas.
Oficialmente se informó que El Chayo fue muerto en un tiroteo en 2010, pero en realidad siguió dirigiendo las operaciones en el estado de Michoacán, hasta que cayó en un intercambio de disparos con las fuerzas de seguridad en marzo de 2014.
Sean peras o manzanas, siempre hay que dar el beneficio de la duda cuando se trata del trabajo de autoridades en pos de identificar fehacientemente la identidad de los grandes capos de la droga. Equivocaciones las ha habido y podrían repetirse. Gracias y buen inicio de semana.
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