No hay vuelta atrás. BP se propuso cambiar de manera profunda. La empresa británica que descubrió petróleo en 1908 y siempre le apostó al carbón, crudo y gas, hoy mira fuera del barril.
- La petrolera se comprometió a hacer un transformación radical en sus operaciones para que en el 2050 sus emisiones de carbono sean igual a cero, un reto nada sencillo al tomar en cuenta que hasta el año pasado fue considerada como la sexta compañía más contaminante del mundo.
- El recién llegado director ejecutivo de BP, Bernard Looney, es quien lleva el estandarte en esta revolución verde que consiste, por principio, en reducir la producción de petróleo y gas para enfocar los esfuerzos de la compañía en el segmento renovable: energía eólica, solar e hidroeléctrica.
- Dentro de la estrategia también destacan el desarrollo de combustibles no contaminantes, como el hidrógeno y los vehículos eléctricos.
- La idea es que con este nuevo modelo que entró en vigor el pasado 1 de julio BP transite de ser una petrolera con presencia internacional a una compañía de energía que brinde soluciones.
Sin embargo, en este momento lucha con el impacto de la pandemia por una menor demanda de energía y una restructura interna que obligó a sus directivos a reducir gastos mediante el despido de 10 mil empleados y a cancelar 17 mil 500 millones de dólares en activos.
Paul Alejandro Sánchez, especialista en energía, considera que el plan de transformación es positivo y resulta evidente de cara a los sucesos en el mercado petrolero internacional.
Las grandes petroleras buscan posicionarse como empresas de energía y esta transformación de BP está pensada hacia el futuro. La pandemia no fue la reponsable de este cambio, pero sí lo aceleró/REPORTE INDIGO-PUNTOporPUNTO