La diputada de Morena, Lorenia Iveth Valles Sampedro, presentó una tipificar como delito el discurso de odio ante el incremento de éstos y castigarlos para evitarlos.
- La legisladora aseguró que representaun grave peligro para la cohesión de una sociedad democrática, la protección de los derechos humanos y el Estado de Derecho, por lo que considera necesario velar por que estas expresiones no se empleen para silenciar a las minorías ni para reprimir la crítica a las políticas oficiales, la oposición política o las creencias religiosas.
- La propuesta es castigar con cuatro años de prisión o de 150 a 300 días de trabajo a favor de la comunidad y hasta 360 días multa a quien atente contra la dignidad humana o anule o menoscabe los derechos y libertades de las personas.
«La sanción aplicará cuando se discrimine por razones de origen o pertenencia étnica o nacional, raza, color de piel, lengua, género, sexo, preferencia, orientación o identidad sexuales, edad, estado civil, origen nacional o social, situación de movilidad humana, condición migratoria, condición social o económica, condición de salud, embarazo, opiniones políticas o de cualquier otra índole», detalló.
La iniciativa reforma y adiciona diversas disposiciones al artículo 149 ter del Código Penal Federal, y fue turnada directamente a la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados para su discusión y posterior dictaminación.
El discurso de odio, dijo, es una animadversión u hostilidad abierta hacia las personas o los colectivos en los que se integran por el color de su piel, su origen, su etnia, su religión, su discapacidad, su ideología, su orientación u identidad sexual, entre otros motivos discriminatorios.
- La diputada indicó que el discurso de odio a menudo se ampara en la libertad de expresión, una libertad que no es absoluta y está limitada cuando daña otros derechos como la igualdad, el derecho al honor o la dignidad de la persona.
- La Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que está prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las discapacidades, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias sexuales, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas, refirió.
Además, la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación establece dentro de sus artículos la prohibición de toda práctica discriminatoria que tenga por objeto o efecto impedir o anular el reconocimiento o ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades. Así mismo, sanciona todo tipo de propaganda que promueva ideas o teorías basadas en la superioridad de una raza, o que pretendan promover odio y discriminación racial.
A pesar de esto, Valles Sampedro señaló, el discurso de odio parece estar aumentando, especialmente a través de los medios de comunicación electrónicos, los cuales magnifican sus efectos, situación que debe subsanarse prestando el apoyo pertinente a las personas afectadas o a quienes van dirigidas estas expresiones.
Afirmó que la ignorancia y un dominio insuficiente de los medios de comunicación, así como la alienación, la discriminación, el adoctrinamiento y la marginalización, pueden explotarse para fomentar el uso del discurso de odio sin que se aprecien plenamente su auténtica naturaleza y sus consecuencias./PUBLIMETRO-PUNTOporPUNTO