RITA MAGAÑA TORRES
Frente al anuncio del presidente Enrique Peña, el dirigente del PAN, Ricardo Anaya, afirmó que México atraviesa por un momento de profunda debilidad en materia de credibilidad y en el combate a la corrupción.
Dijo que en un punto central de esta crisis de credibilidad en materia de corrupción es que persisten severos cuestionamientos sobre un posible conflicto de interés.
Al tratarse, agregó, de un empresario dueño de Grupo Higa que participa y gana la licitación para construir el tren rápido México-Querétaro y, al mismo tiempo, resulta ser el vendedor y financiero de la polémica Casa Blanca, ubicada en las Lomas de Chapultepec.
Insistió en la urgente necesidad y exigió la creación de una comisión especial en la Cámara de Diputados, cuya responsabilidad sea investigar a fondo este caso.
Advirtió que de haber responsabilidades, el Fiscal Especializado en Materia de Delitos relacionados con Hechos de Corrupción deberá tener como máxima prioridad, proceder de inmediato encausar el asunto para que se sancione a los responsables, “Como dice la sabiduría popular, el ejemplo por casa empieza”.
Anunció que solicitó formalmente a los órganos la expulsión del partido del diputado Edgar Borja Rangel e informó, como presidente del PAN, que sancionaremos a todo militante, particularmente, servidores públicos que incurran en actos de corrupción, “basta de impunidad y en esto empezamos por casa”.
Reiteró la necesidad de que México cuente con un Sistema Nacional que permita combatir la corrupción de manera eficaz.
Por eso, el presidente del PAN convoco al gobierno federal y a los grupos parlamentarios de todos los partidos políticos para que consideren su iniciativa que, de aprobarse, “estamos seguros le va a hacer un gran bien a México”.
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