Las denuncias de moches, adjudicaciones directas y falta de transparencia en contratación de empresas para brindar servicios en el gobierno estatal de Jaime Bonilla Valdez, ahora alcanzaron al Sector Salud.
Lo anterior, de acuerdo a un par de denuncias presentadas por representantes de empresas de Salud de Monterrey y la Ciudad de México, en poder de Crónica.
- Este nuevo caso de supuestos moches se da cuando aún no se cumple el segundo mes de administración de Jaime Bonilla Valdez, y después de que también se ha dado a conocer que, por adjudicación directa, darán el contrato a una empresa sin experiencia en la expedición de licencias de conducir, donde además se eliminarían los candados de seguridad biométricos con los que contaba el documento, bajo el argumento de que el costo por licencia será “más barato”.
- Las nuevas denuncias se hicieron el pasado 14 de diciembre ante la Secretaría de la Honestidad y la Función Pública, que encabeza Vicenta Espinoza Martínez. En este caso, los quejosos señalan directamente a Carlos Gómez Valdez, director de Programación, Organización y Presupuesto de Isesalud, de exigir y recibir a nombre del secretario de la dependencia, Alonso Óscar Pérez Rico, al menos un millón de pesos de proveedores, por concepto de moches.
Las propuestas se habrían hecho con la promesa de que serían adjudicaciones directas y en las áreas de Banco de Sangre y Laboratorio del Sector Salud en Baja California.
- En las denuncias recibidas a través de la Dirección Jurídica de Responsabilidad y Situación Patrimonial a cargo de Raúl Harari Soto, uno de los quejosos, representante de una firma de la Ciudad de México, señala que bajo la promesa de recibir “varios contratos “, Gómez Valdez les pidió un moche inicial de un millón de pesos.
- Lo anterior ocurrió durante la primera semana de diciembre en curso y refirió que fue el secretario de Salud, Alonso Óscar Pérez Rico, con quien aproximadamente un mes antes (principios de noviembre), se había entrevistado y lo canalizó con Gómez Valdez por ser éste quien atendería las contrataciones de proveedores.
“Acordamos reunirnos en otro lugar para conversar y durante la reunión Carlos Gómez Valdez nos ofrece diversos contratos de servicios para lo cual debemos pagar por anticipado el diez por ciento correspondiente, comprometiéndose a favorecernos con varios contratos”, señaló el denunciante.
Fue en la misma primera semana de diciembre cuando, por indicaciones del Secretario de Salud, según el testimonio, se le entregó a Gómez Valdez un millón de pesos como prueba del interés por los acuerdos y verse favorecida la empresa que representa con la adjudicación de varios contratos.
Sin embargo, desde entonces, el funcionario señalado dejó de contestar las llamadas.
- En una segunda denuncia, realizada por una empresa de Monterrey, también en contra de Gómez Valdez y Pérez Rico, se establece que, en la segunda semana de noviembre pasado, se reunieron con el Secretario de Salud para expresarle el interés de la empresa por participar en los concursos de Banco de Sangre y Laboratorio.
El funcionario los canalizó también con Gómez Valdez, quien fue muy claro al decirles que “los proveedores beneficiados con los contratos tendrían que pagar un millón de pesos a cuenta de moches”, a lo cual se negaron, según sus declaraciones ante las autoridades de la Secretaría de Honestidad y Función Pública.
El denunciante agregó que se buscó reunirse nuevamente con Gómez Valdez para darle seguimiento al tema, pero éste les expresó que él sólo atendía instrucciones del secretario de Salud, Alonso Óscar Pérez Rico, y que a la fecha no había proyectos donde se pudiera incluir a la empresa.
El empresario consideró que esto una represalia por haberse negado a proporcionar el moche del millón de pesos.
Cabe mencionar que estas nuevas denuncias se suman al escándalo registrado en la Secretaría de Bienestar, que costó la salida de su titular, Cynthia Gissel García Soberanes, y del Oficial Mayor, Jesús Nuñez Camacho, señalados de recibir más de 20 millones de pesos de parte de diversos proveedores para favorecerlos con contratos directos o licitaciones a modo./LA CRONICA-PUNTOporPUNTO