Camina por las calles laterales justo al lado del emblemático Paseo de la Reforma de la Ciudad de México, y verás docenas de ejemplos de algo que está frenando el crecimiento: la economía informal.
Los trabajadores en los carros de tacos o puestos de boleros no pagan impuestos, renunciando a los beneficios de una red de seguridad social. Y a menudo permanecen inactivos la mayor parte del día.
Héctor López, de 50 años, es uno de ellos. Durante los últimos 25 años, se ha sentado en la calle durante 10 a 11 horas al día esperando a la mayor cantidad de clientes, que pagan 30 pesos por cinco minutos de encerar y pulir sus zapatos. Pasa el 90 por ciento de su tiempo leyendo el periódico, o simplemente esperando.
- Eso ayuda a explicar por qué la economía de México no ha estado creciendo mucho. Supera las 36 naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) por horas trabajadas, pero es la menos productiva. Al igual que otros países que se quedaron atrapados en el segmento de ingresos medios, ocupa la mitad del índice de productividad de Drivers and Disrupters, la clave para desbloquear el crecimiento a largo plazo.
«El dinero que gano no es suficiente, y sería muy costoso» pagar impuestos, dice López. Reconoce que la evasión fiscal generalizada tiene un costo: servicios públicos de menor calidad. “Aquí no obtenemos ningún beneficio. La bendición de Dios, nada más».
- La economía de México ha crecido a solo 2.4 por ciento anual durante los últimos 25 años, la mitad del promedio de los mercados emergentes. Este año probablemente será peor, con un pronóstico de crecimiento del uno por ciento o menos.
- Para alcanzar tasas de crecimiento cercanas al 4 por ciento que apunta el presidente Andrés Manuel López Obrador, es necesario contar una mayor productividad, afirma Manuel Molano, director del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Pero el exceso de oferta de mano de obra barata en México significa que hay pocos incentivos para innovar, señala Molano.
El exceso de mano de obra se puede ver en todas partes, desde restaurantes de la Ciudad de México con dos camareros por mesa, hasta complejos turísticos de playa llenos de trabajadores que compiten por los mismos dólares de los extranjeros.
Cuando las empresas aumentan la producción, a menudo son extorsionadas por todos, desde jefes sindicales y políticos hasta el crimen organizado, destaca Molano. Las familias contratan a conocidos, por temor a que personas externas roben o a que aprendan el modelo de negocio y luego se vayan para convertirse en un rival.
«México es básicamente una economía dual», declara Alberto Ramos, economista jefe para América Latina de Goldman Sachs.
“Algunos enclaves están integrados globalmente. Y luego está el campo, con bajos niveles de capital humano y educación, violencia, donde el crecimiento de la productividad ha sido cero durante 50 años ”.
AMLO, quien asumió el cargo en diciembre del año pasado, proviene de Tabasco y es muy consciente de la desigualdad.
Algunos de sus mayores programas de infraestructura, incluida una línea de ferrocarril de carga a campo traviesa destinada a competir con el Canal de Panamá, están orientados a los estados más pobres del sur. López Obrador también ha realineado el gasto para centrarse en los servicios sociales, en particular las transferencias directas de efectivo a estudiantes y ancianos.
Pero los problemas duales de la informalidad y la evasión fiscal dejan al gobierno sin recursos para enfrentar la pobreza y construir infraestructura.
- México recauda alrededor del 16 por ciento del PIB en impuestos, menos de la mitad del promedio de la OCDE. Y para obtener incluso esa escasa cantidad, depende mucho más de los impuestos corporativos, y menos de las contribuciones a la seguridad social, que sus pares de la organización.
- El exsecretario de Hacienda, Carlos Urzúa, argumentó que México necesitaba una reforma fiscal para fortalecer el Estado de derecho y poner a disposición más recursos. Citó la negativa de AMLO a buscar uno como una razón para su sorpresiva renuncia en julio.
«Para elevar la productividad, México necesita tres cosas», expuso Molano. «Instituciones, instituciones, instituciones»./EL FINANCIERO-PUNTOporPUNTO