En los actos de campaña, cuando la gente le pregunta por qué hay que votar por él, qué es lo que le hace distinto de los demás candidatos de las primarias del Partido Demócrata, Pete Buttigieg tiene una broma preparada: “Esta va a ser vuestra única ocasión de votar por un millennial, gay, maltésamericano y episcopaliano”.
Decir que Pete Buttigieg es un candidato atípico a presidente de EE UU es quedarse muy corto. Su experiencia en el ámbito público es ser alcalde desde 2011 de un pueblo modesto del Medio Oeste llamado South Bend, en Indiana.
“Al venir del Medio Oeste industrial he visto la desafección de los norteamericanos con la realidad en la que nos encontramos”, dice Buttigieg en una entrevista telefónica con EL PAÍS.
- No esconde que su atractivo consiste en un mensaje muy progresista y, a la vez, la sensación de que es capaz de hablar a los republicanos. (…) “Hay una mayoría muy amplia para las cosas que yo propongo”, afirma.
- “Los demócratas desde luego están muy motivados. Pero deberíamos ser capaces de ganar con una mayoría contundente. No solo hay que ganar a Trump, hay que derrotar el trumpismo. Para que eso ocurra, necesitamos un candidato que pueda ganar también mayorías en la Cámara y el Senado”./ EL PAÍS