A casi 10 años de que se instalaron arcos detectores de metales en el Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, con el propósito de inhibir la portación de armas de fuego y objetos punzocortantes, dichos aparatos son considerados adornos, ya que se encuentran subutilizados.
En la estación Chabacano de la línea 2, en la correspondencia con las líneas 8 y 9, uno de los policías auxiliares encargados del funcionamiento de estas máquinas a gritos dice a los usuarios: Si gustan pasar sus mochilas, maletas o bolsas por el detector, pero la mayoría de personas hace caso omiso. Una situación similar ocurre en la estación Zócalo, donde los dispositivos pasan inadvertidos para los usuarios.
- Sin embargo, hay quienes están en favor del uso obligatorio de esos dispositivos en todas la líneas, ya que se debería considerar que millones de personas utilizamos este transporte y cualquiera puede entrar con un arma.
- Asimismo, otros pasajeros comentaron que al menos se deberían utilizar de manera forzosa en las líneas que corresponden a las colonias consideradas como focos rojos, pues parece que sólo están de adorno./LA JORNADA