El titular del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), Rafael Carmona, dijo que tras de años de construcción el Túnel Emisor Oriente (TEO) arrancará operaciones saturado, pues las condiciones que se tomaron en cuenta para su diseño cambiaron durante ese lapso.
«El Túnel Emisor Oriente se pondrá en servicio este año y está saturado porque las condiciones que fueron tomadas en cuenta para su diseño han cambiado (…) Hace 10 años decidimos la construcción del Túnel Emisor Oriente, bajo condiciones muy distintas de lo que es ahora la ciudad, bajo condiciones en donde no teníamos ese desarrollo de infraestructura en la zona oriente como lo tenemos actualmente», lamentó al participar en el Seminario de Seguridad Híbrida Urbana: La Gestión del Riesgo de Inundaciones.
Durante el evento realizado en el Colegio de México, el funcionario capitalino reconoció que sacar las aguas residuales de la ciudad para evitar que colapse por inundaciones, representa llevar ese problema a Tula, Hidalgo.
- «Sacar el agua a través de los túneles empieza a tener efectos fuera del Valle de México, el agua que sale de la Ciudad de México y su zona conurbada llega al Estado de Hidalgo, y el Estado de Hidalgo también tiene límite en sus causes, no puedo transitar grandes avenidas provenientes del Valle de México a través del río Tula hacia la presa Endhó (…) simplemente estaremos trasladando nuestro problema de inundaciones y afectaciones a otras zonas fuera del Valle de México».
- Por su parte, Luis Jaime Sobrino, Director del Centro de Estudios Urbanos de El Colegio de México destacó que en la revisión 2019 de la perspectiva de la población mundial, hoy más habitantes viven en las ciudades urbanizadas y que son de mayor tamaño como Tokio que cuenta con 40 millones de habitantes y la Ciudad de México que es la cuarta más grande del mundo junto con Nueva York y Nueva Dheli, “ahora los retos no son sólo demográficos y cada vez son más parentes los aspectos ambientales”.
Mariano Montero, de Fundación FEMSA, destacó que hay que empezar a cuantificar y monetizar los impactos de los encharcamientos, ya que ante la realidad del cambio climático se requiere de nuevos modelos financieros y económicos para saber medir el impacto y el costo de las afectaciones por las lluvias.
Resaltaron que de cuerdo con The international disasters database, en México se han registrado poco más de 253 eventos considerados como desastres, en su mayoría durante el siglo veinte; el 80 por ciento de origen hidrometeorológico, de los cuales 33 por ciento se refieren a las inundaciones.
En su oportunidad, Judith Domínguez, coordinadora del doctorado en Estudios Urbanos y Ambientales del Colegio de México, dijo que esa institución creó el Observatorio de Seguridad Hídrica para hacer análisis estratégicos en temas de agua e identificar sus problemática.
- «Nos hemos puesto a reflexionar como sociedad, incluso creo que también como gobiernos, la importancia de atender las lluvias que ahora son atípicas y frecuentes, que en 10 minutos o una hora nos pueden ocasionar no sólo la molestia de no poder salir del trabajo, sino efectos mayores y es un tema al que no le estamos dando mucha atención».
Por ello, dijo que se debe de tomar acciones con una visión de enfoque de riesgos, con los instrumentos que ya se tienen, como los Atlas de Riesgo./MILENIODIARIO-PUNTOporPUNTO