En la Cuauhtémoc, no hay freno para los ambulantes. Las jardineras que puso la Alcaldía en 2016 para evitar que se instalara el comercio informal no los vencieron y, ahora, hasta ofrecen manicura y pedicura en plena banqueta ¡y aceptan pago con tarjeta de crédito! Durante un recorrido, REFORMA contabilizó 50 puestos de diferentes giros en la cuadra conformada por Insurgentes, Tlaxcala, Chilpancingo y Baja California.
Sobre la acera de Insurgentes, el espacio para el paso de peatones es mínimo, ni siquiera es posible que dos personas caminen hombro con hombro, debido a la presencia de jardineras y puestos. Es aún peor cuando alguien transita con un diablito o bicicleta, pues se forma un cuello de botella en el que, incluso, peatones deben «entrar» a los locales establecidos mientras otros caminantes liberan el paso./REFORMA