AGENCIAS
Un grupo de manifestantes que pedía justicia para los 43 estudiantes desaparecidos hace más de un mes en el municipio mexicano de Iguala recibió hoy con abucheos a la delegación del Gobierno de México que acudió a la CIDH para explicar su Programa Nacional de Derechos Humanos.
Los manifestantes gritaron «¡Criminales, asesinos!» a los funcionarios mexicanos que tienen previsto intervenir hoy en el 153 periodo de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que se celebra en Washington.
«Es obvio que el Gobierno mexicano ha dado una versión oficial que no es cierta. Hoy estamos aquí para romper esa versión oficial», clamó uno de los portavoces del grupo, Salvador Sarmiento, quien invitó a los activistas a entrar a las cinco audiencias públicas que la CIDH celebrará sobre el país.
La desaparición de los estudiantes probablemente saldrá a relucir en la primera de estas audiencias, solicitada por el Ejecutivo mexicano para explicar su Programa Nacional de Derechos Humanos.
En unas declaraciones a Efe, Jacqueline Sáenz, de la asociación Fundar, consideró que «exponiendo el Programa Nacional de Derechos Humanos no se resuelven las cosas», y consideró «muy importante dar una respuesta a un discurso oficial incierto».
A su juicio, existe una realidad que «lacera a todo el país» y, en este sentido, destacó que a julio de 2014 la cifra de personas desaparecidas es de más 22.000, a los que se suman los 43 jóvenes de Iguala y la «lista negra que no se ve».
Con una bandera de México y pancartas en las que podían leerse mensajes como «Ni perdón, ni olvido», los manifestantes colocados en medio círculo gritaron durante cerca de una hora los nombres de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, en el estado de Guerrero.
«Vivos se los llevaron y vivos los queremos» fue otra de las consignas más repetidas por los activistas, que portaban varios carteles en los que la palabra «Missed» («Desaparecido») se superponía a la cara y nombre de los 43 jóvenes.
El subsecretario de la cancillería de México Juan Manuel Gómez Robledo, adelantó hoy a Efe que su Gobierno y los representantes de los familiares de los estudiantes buscarán un acuerdo en la CIDH para formar un grupo de expertos que ayude buscar a los desaparecidos el 26 de septiembre.
Esa noche, policías atacaron a tiros a estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa presuntamente por órdenes del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca.
Según la investigación, los agentes detuvieron a 43 estudiantes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, cuyo líder, Sidronio Casarrubias, ordenó su desaparición creyendo que se trataba de miembros de Los Rojos, un grupo criminal rival.