Entre enero y el 15 de febrero de este año, la petrolera presentó 14 denuncias por el robo de distintos equipos, materias o herramientas por parte del crimen organizado que utiliza embarcaciones para abordar estas instalaciones.
• Las denuncias, de acuerdo con información entregada por Pemex a través de la Plataforma Nacional de Transparencia, se hicieron ante el Ministerio Público Federal con sede en Ciudad del Carmen, Campeche, y están en fase de integración de carpetas de investigación.
• La denominada Sonda de Campeche se ubica a una distancia de 150 kilómetros de la costa y en ella operan de manera permanente más de 100 plataformas.
• Pemex mostró que en 2018 se reportaron 60 actos de robo y vandalismo en instalaciones marinas.
• En enero del año pasado, el crimen organizado realizó 11 abordajes ilegales a las plataformas May-C, Bolontiku-B, Kab-B (en cuatro ocasiones), Tsimin-B (en dos ocasiones), Xanab-B, Tsimin-C.
• Durante esos abordajes, los piratas lograron apropiarse de placas antiderrapantes de aluminio de helipuertos, rollos de cable eléctrico, módulos, tableros de seguridad y control de pozos, banco de baterías, gabinetes de luces de navegación, cableado del rack de transmisores de plataformas o batidores con su malla perimetral, entre otros.
• En ocasiones, según los reportes, se busca dispersar con agua las lanchas y embarcaciones ribereñas que se pegan a plataformas: “Cuando se logra alejar a delincuentes, suelen provocar daños en diferentes partes de las estructuras, principalmente en cables de diferentes calibres”.
• Los datos sobre las plataformas abordadas en los primeros dos meses del año no fueron difundidos para no entorpecer las investigaciones y el debido proceso.
• Sin embargo, los agentes del Ministerio Público de la Federación y el Fiscal Orientador de Ciudad del Carmen enfrentan el problema de ejercer acción penal “por no tener identificadas a las personas responsables del ilícito”.
• Más aún, la petrolera reconoce que hay un número importante de robos y actos vandálicos de los cuales no se realiza la denuncia, aunque la información proporcionada vía la Plataforma Nacional de Transparencia no especifica las causas.
Por ejemplo, el pasado 8 de enero de 2018 fueron sustraídas de la plataforma Chuhuk-A cinco bombas de dosificación marca Check Point (dos del Instituto Mexicano del Petróleo y tres de la empresa Kanutam), con valor de 361 mil 900 pesos, pero no se levantó denuncia.
• El 5 de febrero de ese año, los delincuentes robaron 24 baterías del sistema de luces perimetral del helipuerto de la plataforma Kuil-A y 84 metros de cable multiconductor, todo con valor de 236 mil 496 pesos. Tampoco hubo denuncia.
• El 10 de mayo de ese mismo año, se robaron una bomba de inyección de mejorador de flujo; una bomba de inyección de inhibidor de incrustaciones de la empresa Diavaz; una balsa salvavidas para 25 personas, y 11 equipos de respiración autónoma, con un valor total de 736 mil 992 pesos de la plataforma Ixtal-A.
• El robo más cuantioso de los piratas se presentó el 22 de agosto, cuando lograron sustraer, una vez que abordaron la plataforma Ankatun-A-Temporal: seis chaquetones y pantalones de bombero; nueve pares de botas de bombero; siete cascos de bombero; dos salvavidas circulares; dos monitores de CI; dos boquillas de hidrantes; 10 reguladores de presión; cinco reguladores de presión modelo 64, y 10 bombas hidráulicas. Todo ello, propiedad de Pemex. Además, 25 metros de cable para máquina de soldar propiedad de la compañía Cotemar.
• Esta vez, los ladrones se llevaron este equipo con un valor aproximado a un millón 913 mil 569 pesos.
Incluso, hay evidencia de que en cada abordaje a plataformas, el crimen organizado busca robar el mayor número de equipos, herramientas y maquinaria./EL UNIVERSAL-PUNTOporPUNTO