Cualquiera de las dos opciones que se elijan en la consulta sobre el nuevo aeropuerto podría tener un costo muy superior a lo hasta ahora informado, según un análisis del Foro Consultivo, Científico y Tecnológico (FCCyT).
• El documento indica que para las dos opciones existen factores que aún no han sido considerados, como el impacto ambiental, los costos por mantenimiento, construcción de vialidades y transporte terrestre que conecte las terminales con la Ciudad de México, así como obras hidráulicas adicionales.
• Para el caso de Texcoco, apunta, se deberá sumar el costo por la pérdida del actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez y el de la Base Aérea de Santa Lucía, los cuales no podrían funcionar simultáneamente. Además, indica, es necesario actualizar el gasto total que implica el retraso de la construcción.
• El Foro, creado en 2002 para asesorar al Gobierno federal, al Congreso y al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), explica que las obras en Texcoco fueron anunciadas en septiembre de 2014 con un costo total de 178 mil 50 millones de dólares, equivalentes a 209 mil 493 millones de pesos al tipo de cambio actual.
La estimación incluía todas las fases de construcción, obras complementarias, operación y mantenimiento, seis pistas y una terminal. Sin embargo, a la fecha por la variación del costo del dólar y por varios ajustes aún cuestionados, la estimación actual es de 285 mil millones de pesos y eso implica únicamente la construcción de la primera fase, con tres pistas y una terminal.
• El análisis, que consideró cerca de 100 estudios sobre este tema, estima que el costo total del aeropuerto en Texcoco podría incrementarse hasta 493 mil 330 millones de pesos.
• En tanto, la opción que incluye una terminal en Santa Lucía y que funcionaría junto al actual aeropuerto, no considera el monto total del estudio de factibilidad, el costo por la cancelación de las obras en Texcoco y los trabajos de remediación de los terrenos ya afectados.
Subraya el estudio, es necesario incluir los costos que implicarían el manejo de dos aeropuertos al mismo tiempo.
• La opción de construir tres pistas y una terminal en la Base Aérea Militar ha sido cotizada en 70 mil 342 millones de pesos. A este cálculo habrá que sumarle el estudio de factibilidad que puede llegar a costar el 5 por ciento del total.
Además, las obras de reacondicionamiento del aeropuertos de Toluca y el AICM fueron calculadas en aproximadamente 5 mil millones de pesos y la cancelación de las obras en Texcoco rondan los 100 mil millones.
El costo total mencionado en el documento del Foro Consultivo para la opción de Santa Lucía se eleva de hasta los 293 mil 100 millones de pesos.
¿Y los recursos?
El análisis que FCCyT entregó el miércoles al equipo del Andrés Manuel López Obrador también incluye un comparativo del financiamiento.
En Texcoco, de los 285 millones de pesos calculados, sólo 28 mil millones son aportados por el Presupuesto Público y el resto por la iniciativa privada que espera recuperar su inversión mediante la Tarifa de Uso Aeroportuario (TUA) que pagan los usuarios.
• En la Opción de Santa Lucía más la adecuación de los otros dos aeropuertos, el estudio indica que no existe información sobre la situación del financiamiento.
• El estudio está disponible en la página www.foroconsultivo.org.mx e incluye resúmenes sobre otros puntos de de las dos opciones, como la viabilidad aeronáutica, el consumo de agua, drenaje y tipo de suelos, vialidades e impacto urbano y social.
¿Viable?
Expertos analizaron las opciones incluidas en la consulta sobre el nuevo aeropuerto. Éstas son algunas de sus conclusiones:
• AICM y Santa Lucía tienen la capacidad de operar de manera simultánea, debido a que las pistas son paralelas.
• La opción NAIM requiere la clausura de los otros dos aeropuertos.
• Existen dudas sobre la capacidad simultánea en Santa Lucía + AICM.
• Con las rutas actuales los aviones coincidirían en el radiofaro de San Mateo, antena guía.
• El centro MITRE indicó que estos aeropuertos no tendrían ritmo suficiente.
• Otra autoridad de la ONU avala un posible rediseño del espacio aéreo y la relocalización del faro.
Ambientalistas rechazan a Texcoco
Este sábado, más de cien ciclistas llevaron a cabo una rodada que partió del Monumento a la Revolución y concluyó con una protesta en la autopista Peñón-Texcoco, frente a los terrenos donde se construye el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), como parte de una serie de movilizaciones de organismos sociales y defensores de derechos humanos que pretenden frenar el desastre ambiental que implicará esa obra.
• Organizaciones como Familiares en Búsqueda María Herrera y Movimiento Popular de Pueblos y Colonias del Sur, entre otras, acompañados por el obispo de Saltillo, Raúl Vera, demandaron que más allá del resultado de la consulta, el presidente electo (Andrés Manuel López Obrador) asuma como un acto de decisión política la cancelación del proyecto del nuevo aeropuerto.
• El obispo Vera sostuvo que el NAIM es una fuente de ganancias millonarias para unos cuantos, porque lo que ahí interesa es todo lo que va a haber de mercado alrededor, no lo ocultan. A cambio de ganancias para unas cuantas familias, la destrucción del hábitat, de la naturaleza, afectaría enormemente esta ciudad.
La rodada partió de la Plaza de la República y recorrió más de 25 kilómetros hasta llegar a la puerta siete del NAIM. A los ciclistas capitalinos se sumaron integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT).
• Es especialista Ramón Ojeda Mestre lamentó que el gobierno federal no haya incluido a las autoridades locales en el proyecto, el cual ocasionará un grave impacto en términos de movilidad, servicios públicos y medioambiente.
• En tanto, el urbanista Roberto Eibenschutz llamó al gobierno federal a aplazar tres meses el proyecto con el propósito de que pueda adoptarse la mejor decisión.
• Para el arquitecto, lo más viable es cancelarlo y pensar en usar como alternativa otros aeropuertos del centro del país que están subutilizados; un claro ejemplo de ello es el de Toluca, que opera a la décima parte de su capacidad, señaló.
La próxima semana el gobierno electo de Andrés Manuel López Obrador realizará la consulta pública para determinar si se cancela el proyecto impulsado por la administración del presidente de Enrique Peña Nieto. /REFORMA – LA JORNADA- PUNTOporPUNTO