La fiesta de los seres fantásticos en el Centro Histórico volvió y 200 alebrijes monumentales -incluido uno de nombre Eligiendo mi destino, creado por personas en reclusión-, desfilaron por decimosegundo año consecutivo desde el Zócalo capitalino hasta Paseo de la Reforma, llenando de color las calles de la ciudad. Por primera vez, personas privadas de la libertad de un Centro de Reclusión de la Ciudad de México participaron en este desfije y concurso. Los alebrijes nacieron de los diseños y las ideas conjuntas del artista plástico José Gómez Rosas, conocido como El Hotentote, y del maestro artesano Pedro Linares, a finales de los años treinta del siglo XX, en el barrio de La Merced./ EXCÉLSIOR