Autoridades mexicanas comprobaron que narcotraficantes colombianos están viajando a su país para entrenar a integrantes de carteles locales en técnicas de combate, secuestros y torturas, así como también confirma una creciente relación entre los criminales de ambos países para fortalecer sus estructuras, incluidas alianzas para el tráfico de cocaína.
- Recientemente, policías de investigación encontraron en Jalisco a varios jóvenes de entre 25 y 35 años que estaban siendo entrenados para ser sicarios y para saber cómo torturar a las víctimas, en una especie de campamento acondicionado para el adiestramiento que pudo ser desmantelado. Así lo reveló una investigación de la revista Semana.
- Asimismo, en el estado de Veracruz fueron halladas otras instalaciones para enseñar técnicas de tortura y de elaboración de explosivos con capacidad para 120 personas. Y así se han ido encontrando por lo menos 17 campamentos equipados para tal fin en varios estados de México que pertenecen al temido Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
- Cabe destacar que esta práctica no es nueva. Y es que de acuerdo con el medio que publicó la investigación, en la época de José Gonzalo Rodríguez Gacha, alias ‘El Mexicano’, fundador miembro del Cartel de Medellín, muchos mexicanos del CJNG viajaron a la selva colombiana para ser entrenados por las FARC, y a su vez sicarios del capo, liderados por un capitán retirado del Ejército, fueron a entrenarse a México.
- Dicha situación se pudo confirmar con un video que circuló a comienzos de año en el que se observa cómo hombres encapuchados y armados torturaron a dos investigadores en Puerto Vallarta, Jalisco, y que posteriormente fueron encontrados descuartizados.
Gracias a este y otros métodos, el CJNG expandió su poderío a gran parte del territorio nacional. Estas pruebas contundentes confirman la presencia de llamados ‘narcomercenarios’ de nacionalidad colombiana quienes serían los encargados de impartir las clases.
De hecho, capturados han confesado que como parte del entrenamiento secuestraban a enemigos para asesinarlos cortándolos en distintas partes del cuerpo. Hasta los ponían a comer la carne, describe Semana.
Estas mismas redes son las que utilizan otros carteles mexicanos como el de Sinaloa para fortalecer sus negocios con las bandas criminales colombianas como sus mayores proveedores de cocaína, a las cuales financian para tal fin./ CON INFORMACIÓN DE LA SILLA ROTA