La reforma constitucional que terminó con el monopolio de más de siete décadas de Pemex, para permitir la entrada a otras petroleras, enfrentará un posible cambio de ritmo y hasta de rumbo tras la victoria en la carrera presidencial de Andrés Manuel López Obrador.
- López Obrador ha prometido revisar los contratos otorgados a las petroleras privadas e incluso ha dejado abierta la puerta a proponer cambios en las leyes que rigen el sector energético.
- Los expertos de la industria, sin embargo, no creen que la reforma se vaya a revertir. “No creemos que la reforma energética esté en riesgo, aunque es muy probable que veamos, a lo mejor, retrasos en la implementación”, dice Ixchel Castro, analista de la consultora especializada Wood Mackenzie.
- A pesar de la aversión que ha mostrado por la reforma energética, el político tabasqueño va a requerir de este nuevo modelo para alcanzar las metas de producción de crudo de México en su gobierno, agrega la experta.
“Aunque se puedan suspender de manera temporal las rondas (las licitaciones de bloques petroleros a las empresas), deberíamos para 2019 tener subastas en el mercado con el ánimo de atraer nuevos actores”, dice Castro.
- Hasta el momento, las autoridades sectoriales han licitado 107 contratos petroleros para explorar hidrocarburos en tierra, en aguas someras y profundas. Esto puede generar inversiones de hasta 160,000 millones de dólares, en caso de tener éxito exploratorio y comercial, según autoridades.
López Obrador mencionó en su discurso de triunfo que revisará los contratos derivado de las licitaciones energéticas, una promesa de campaña que resonó entre el sector, que se ha mostrado abierto a que se le audite.
- “No habló de revertir o tratar de cambiar la constitución para revertir la reforma”, destacó Ociel Hernández, economista y estratega en jefe de BBVA Bancomer, en una conferencia telefónica este lunes.
Los analistas coinciden en descartar que pueda darse un cambio constitucional, pero sí prevén modificaciones a la actividad energética. “Creo que sí habrá cambios al nuevo modelo energético, y más con el respaldo popular y legislativo que tiene. Estos cambios se darían en la Ley de Hidrocarburos y en la de Ingresos Sobre Hidrocarburos”, dice el director general de la consultora GMEC, Gonzalo Monroy.
Las calificadoras internacionales Moody’s y Fitch lanzaron sendos reportes advirtiendo sobre los riesgos de que el nuevo gobierno centre sus fuerzas en impulsar la inversión a través de Pemex, así como en la construcción de nuevas refinerías y en menores impuestos por el tema de la gasolina, pues todo esto puede generar estrés a las finanzas públicas, según estas agencias. / CON INFORMACIÓN DE EXPANSIÓN
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