La delincuencia nos está ganando territorialmente, en algunos casos, la batalla, aseguró la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos local (CDHDF), Nashieli Ramírez, quien calificó de muy pobres las políticas públicas impulsadas para atender la portación de armas y los problemas que conlleva. No estamos hablando de una ciudad que no tuviera ley y orden, sino de la existencia de puntos de alto riesgo, donde necesitamos hacer mayores cosas por los cuerpos encargados de la seguridad. La entrada de personal del Ejército o la Marina a resguardar la ciudad no es necesaria, pues no estamos en una situación similar a la de otros estados, donde la gente ni siquiera puede salir de su casa, ante el temor de ser víctima de un delito. Consideró que todavía la situación de inseguridad es controlable, pero está creciendo de manera contextualizada y diagnosticada, por lo que estamos a tiempo de tomar medidas, pues tenemos un sistema policiaco que no capacita, no profesionaliza./LA JORNADA