AGENCIAS
El procurador de Justicia de Guerrero, Iñaky Blanco Cabrera dijo que citarán al alcalde de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, y al director de la Policía municipal, Felipe Flores Velázquez por los hechos del 26 y 27 de este mes, que dejaron seis muertos y 25 heridos, además de seguir buscando a 57 estudiantes.
En conferencia de prensa, el fiscal guerrerense agregó que los desaparecidos de la escuela normal rural Raúl Isidro Burgos, son buscados en tres o cuatro puntos de Iguala, aunque no quiso revelar los lugares.
No descartó la posibilidad de que se le finque responsabilidades a los policías municipales detenidos por el delito de desaparición forzada de personas, debido a que se desconoce el paradero de 57 normalistas.
El funcionario estatal informó que esta noche se determina la situación jurídica de los uniformados y mañana informarán a cuantos se les fincará responsabilidad por los hechos.
Iñaky Blanco reconoció que en el caso hubo excesivo uso de la fuerza pública e incumplimiento de los protocolos de seguridad.
«No hay justificación alguna para que hayan hecho uso de arma de fuego, todo parece indicar que vamos a fincar responsabilidad de tipo penal en contra de estas personas», afirmó.
Mientras tanto, el estudiante normalista que fue encontrado muerto, fue identificado como Julio César Mondragón.
El fiscal guerrerense dijo que por la mecánica de los hechos que se registraron en Iguala, se pudo tratar de una confusión en cuanto a la ataque sufrió el autobús donde viajaban los jugadores de futbol «Avispones de Chilpancingo».
En el caso del ataque de que fueron víctimas los estudiantes de Ayotzinapa, sí participó la policía municipal, debido a que fueron identificados, y a 16 elementos les salió positiva la prueba de radizonato de sodio (para confirmar si habían accionado armas de fuego).
Insistió que durante los hechos violentos en Iguala se observaron en las cámaras de vigilancia hombres vestidos de negro y encapuchados, que se transportaban en camionetas negras.
«Por la forma de la mecánica de los hechos y el calibre estimamos que pudieran tratarse de la delincuencia organizada, pero no tenemos los elementos para acreditarlo».