Redacción
El edificio ubicado en el número 238 de la calle Nuevo León, en la colonia Condesa, quedó tan dañado por el sismo del pasado 19 de septiembre, que los habitantes de dos edificios contiguos tuvieron que ser desalojados por daños colaterales y el riesgo que corren sus vidas.
El inmueble de Nuevo León 238 es el mismo sobre el cual se construyó en meses pasados un helipuerto en flagrante violación a la normatividad y con la anuencia de la delegación Cuauhtémoc, gobernada por el aún morenista Ricardo Monreal Avila.
Hace algunos meses, cuando los vecinos organizados detectaron que se realizaba la construcción del helipuerto, pidieron la intervención de la delegación Cuauhtémoc y de las autoridades del gobierno de la Ciudad de México, pero no fueron escuchados.
Luego de hacer una denuncia pública y de exponer ante los medios de comunicación las evidencias de las violaciones a la normatividad y el riesgo en que se ponía a los vecinos, por fin la delegación acudió a colocar sellos de clausura en las obras.
Sin embargo, los vecinos aseguran que los sellos fueron colocados únicamente en los cristales, pero los funcionarios de la delegación dejaron los accesos abiertos, lo que permitió que las obras continuaran.
Los vecinos documentaron con videos en su momento que las obras continuaron hasta que el helipuerto quedó prácticamente concluido. Y las autoridades de la delegación se hicieron los desentendidos.
Expertos estructurales revisaron la obra y dijeron a los vecinos que en ese edificio no se podía construir un helipuerto y que era impensable que un helicóptero aterrizara y permaneciera ahí. Pero las autoridades no reaccionaron.
El pasado 19 de septiembre el sismo dejó severamente dañado el edificio en donde fue construido el helipuerto, mismo que al ladearse golpeó a los inmuebles contiguos, ubicados en los números 230 y 240, en donde viven al menos 50 familias.
Todas estas familias tuvieron que salir de sus casas y no han podido regresar a ellas, porque tanto el edificio del helipuerto como los inmuebles en donde habitan resultaron con daños.
El helipuerto fue construido por Julián Ventosa Aguilera, un poderoso empresario poblano del ramo inmobiliario, que también posee medios de comunicación.
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