Narcos van por gobierno de Veracruz

La de Veracruz promete ser una cruda guerra de cárteles, en la que no solo el gobierno del mandatario Miguel Ángel Yunes se verá involucrado, sino la sociedad misma.
Los 11 cuerpos encontrados en Boca del Río en una camioneta, ajusticiados a manos de Los Zetas y a tan solo unas horas de haber ingresado al territorio contingentes de la gendarmería, es la víspera de lo que se avecina para los próximos meses.
Una fuente en el gabinete de seguridad aseguró a esta columna que desde que se conoció el triunfo de Yunes Linares para suceder en la gubernatura al corrupto Javier Duarte, la delincuencia organizada intentó infructuosamente pactar con el gobierno entrante.
Sin ofrecer detalle alguno, este informante aseguró que fueron mas de tres los acercamientos que intentaron los miembros del cártel de Los Zetas, quienes quisieron madrugar al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) –con quienes luchan por la plaza– para tener de aliado al gobierno local.
Sin embargo, y como la entidad se encuentra en el ojo del huracán nacional ante los fraudes y robos al erario del bandido Duarte, nos dicen que lo que menos necesita el nuevo gobierno es que lo relacionen con la delincuencia organizada.
Es de todos conocido que los gobiernos estatales, pero sobre todo los municipales, suelen hacer acuerdos con los grupos criminales a quienes permiten traficar y cometer delitos a cambio de dádivas económicas o frenar enfrentamientos. Así las cosas, al parecer el mandatario veracruzano quiere hacer las cosas bien.
Por un lado, la llegada de elementos de la gendarmería nos habla de un acuerdo con el Gobierno Federal para recuperar zonas del estado controladas por la criminalidad, pero el macabro hallazgo de los 11 cuerpos, en una literal declaratoria de guerra, nos habla también de que instancias federales encargadas de brindar seguridad deben estar en máxima alerta, por lo que se prevé un reforzamiento del operativo en las próximas semanas, sobre todo por la atinada negativa del gobierno local a pactar.
 
PARA EL REGISTRO Del muro de mi amigo Bernardo Barranco, de los mejores especialistas en temas eclesiásticos —muy socorrido por la fuente religiosa—, respecto al primer sacerdote pederasta condenado: “Es la primera vez que la justicia mexicana dicta sentencia contra un sacerdote católico pederasta. Ante el manto de protección y fuero religioso que históricamente ha gozado el clero mexicano, la noticia es un hito importante. En Oaxaca el sacerdote Gerardo Silvestre Hernández recibió una sentencia de 16 años por el delito de corrupción de menores en su modalidad de inducción a actos sexuales. Hay aún una larga lista”. Bravo, aplausos, ¡a temblar sacerdotes! *** Nada bueno para México se escuchó en el discurso del Estado de la Unión del tirano Donald Trump. Lo que parecía ser una flexibilización de las medidas migratorias por filtraciones periodísticas previas, no fue tal, y las cosas siguen igual o peor que antes. Es preocupante que cada vez que este hombre habla, más de un estadunidense deja volar su espíritu racista y el ambiente contra migrantes se endurece. Tan poca cosa nos considera el bravucón, que lo que pueda decir el canciller Videgaray, o el mismo presidente Peña Nieto, jamás harán mella en la mente enferma de este personaje. Insisto, triste y lamentable. Gracias. Hasta Mañana.
 
 
 
@betata75

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