El peso mexicano todavía tiene espacio para recuperarse gracias en parte al paquete de medidas fiscales y monetarias anunciadas el mes pasado por las autoridades financieras del país, dijo el viernes el jefe del banco central, Agustín Carstens.
El banco central elevó sorpresivamente el 17 de febrero la tasa clave de interés para ayudar a contener las agudas pérdidas del peso frente al dólar, en tanto que el Gobierno anunció un recorte al gasto.
«Yo pienso que todavía hay espacio para que el peso se aprecie», dijo Carstens en entrevista con la cadena Radio Fórmula. «Llegó a depreciarse de manera excesiva, mucho alimentado por acciones de orden especulativo», agregó.
Desde la aplicación de la medidas, después de que el peso alcanzara un mínimo de 19.4480 el 11 de febrero, la divisa ha recuperado terreno. El viernes operaba en 17.80 unidades por dólar.