La presidenta saliente de Argentina, Cristina Fernández, dispuso en el último día de sus ocho años de gobierno nuevos nombramientos de funcionarios públicos y la entrega de un bono al Banco Central por casi 3 mil 600 millones de dólares de sus reservas usadas para cancelar deuda.
Dispuso la emisión de una Letra del Tesoro a 10 años por 3 mil 558 millones para dejarle al Banco Central a cambio de un monto idéntico de sus reservas de divisas que se utilizó en julio para cancelar deuda con organismos internacionales, según informó hoy a través del Boletín Oficial.
Las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) están cerca de los 25 mil millones de dólares, una cifra exigua que obligó a endurecer en los últimos tiempos aun más las restricciones a las operaciones con moneda extranjera.
Por otra parte, el Boletín Oficial anuncia hoy nuevos decretos presidenciales sobre nuevas designaciones de funcionarios en la administración pública y gastos adicionales. En ellas se destacan unos
Por otra parte, se dispusieron más de 154 prórrogas de contratos de trabajo que finalizaban en estos meses y el pase de empleados administrativos a planta permanente para cubrir más de 580 puestos.
También se ordenó una ampliación del gasto público en mil 072 millones de pesos (unos 110 millones de dólares), que llevaría el déficit fiscal a más del 8 por ciento del PIB, el más alto de cerca de 40 años, según cálculos del periódico La Nación.
Estas medidas se suman a otras adoptadas por Fernández en los últimos días, como la devolución de millonarios fondos a las provincias, que condicionarán la gestión de su sucesor, Mauricio Macri, de la alianza opositora Cambiemos.
Con la asunción mañana de Macri de la Presidencia argentina se pondrá fin a la era de doce años de gobiernos kirchneristas.
El extenso ciclo político fue iniciado en 2003 por el peronista Néstor Kirchner, fallecido en 2010, y continuado por su esposa y sucesora Cristina Fernández con dos mandatos consecutivos (2007-2011 y 2011-actual).