RITA MAGAÑA TORRES
El PRI en el Senado discutirá, a partir de septiembre próximo, con todas las fuerzas políticas una Ley General para el Desarrollo Integral de los Jóvenes, que distribuiría las competencias y atribuciones de los tres niveles de Gobierno, a fin de garantizarles espacios de oportunidad.
Señaló que como país sería un grave error no aprovechar el ímpetu, talento y capacidad transformadora de los jóvenes, por lo que lejos de estigmatizarlos, “debemos generarles nuevos espacios de desarrollo”.
De esa forma, manifestó que se traducirán en mejores condiciones de vida para todos. Porque transformar a México, a través de la construcción de un futuro con mayores oportunidades, es la única manera de alcanzar los niveles de desarrollo que nos hemos planteado como nación.
“Convencidos de que la reforma educativa, aunada a la laboral, permitirán que jóvenes tengan acceso a mejores oportunidades y formen parte del desarrollo de México, los senadores del PRI analizarán cambios a la Constitución para responder a la justa demanda de este sector fundamental en la sociedad”, afirmó.
También, agregó, es compromiso del PRI promover, con base en la ley, recursos públicos, para la aplicación de estos programas y que en el proyecto del Presupuesto Base Cero, los jóvenes sean una prioridad, al igual que los grupos más desprotegidos y vulnerables de nuestro país.
Por todo ello, además de impulsar reformas a favor de los jóvenes, los priistas en el Senado estarán abiertos a propuestas de todas las fuerzas políticas, encaminadas a instrumentar programas transversales e integrales, añadió.
Los que, sin duda, deberán tener como base el constante reforzamiento de sus habilidades y capacidades, a fin de que puedan aprovechar la cada vez más evidente vinculación entre la educación y el sector productivo, mencionó.
Para ellos, comentó, son las reformas estructurales que emprendió el presidente Enrique Peña Nieto y que aprobamos en el Congreso, para dejar atrás la medianía que evidentemente estaba lejos de las demandas y los requerimientos de la población.
“Pensando en los jóvenes aprobamos las reformas estructurales, sabedores de que vendrán más inversiones y estamos en la ruta correcta para mejorar la educación y poder enfrentar con éxito las exigencias inherentes a la competencia internacional”, aseguró.
Destacó que ello se traducirá en una mejor calidad de vida, además de mayores oportunidades de desarrollo y bienestar.