– La crisis de la izquierda mexicana; ¿habrá alianzas en el 2016?
La crisis de la izquierda en México es grave y peligrosa. Seguramente sus dirigentes ya dimensionaron que pudiera ocurrir si sigue creciendo la división entre las tribus. En el 2016 habrá elecciones en 13 entidades, en 12 de ellas habrá cabio de gobernador y de acuerdo a declaraciones de la dirigencia del estado de México, Omar Ortega Álvarez la izquierda tiene que unificar criterios para lograr fortalecer sus estructuras. Hoy sabemos que si no hay unidad entre las diferentes corrientes, seguramente los mexicanos verán en el PRD un partido que poco a poco irá desapareciendo.
¿Pero que hay que hacer cuando dice Andrés Manuel López Obrador que ellos son la verdadera izquierda de México?. ¿Habría que creerle? ¿Carlos Navarrete dice que ellos también son de izquierda? Sin embargo, el cinismo en que han caído, casi siempre, los políticos no tiene nombre. Quizá los mexicanos no lleguemos a dimensionar esta palabra, pero tiene mucho de referencia en la vida actual del México moderno. Tal parece que los líderes de los partidos políticos no tienen memoria, mucho menos dignidad.
Dice Jesús Zambrano ex dirigente nacional del Sol Azteca asegura que el cambio del PRD es sincero, honesto y por bien del partido. “Queremos crecer en unidad pero con alianzas de largo plazo y sin condicionamientos. López Obrador ya sabe. Hoy se siete que su partido es la verdadera izquierda y de ahí que haya salido huyendo porque asegura que los perredistas perdieron el rumbo. Lo cierto es que las corrientes o tribus le han hecho mucho daño al partido y que ahora quieren cambiarlo será difícil y dudo que realmente se fortalezca la izquierda.
¿Pero si el PRD no se fortalece y cambia de rumbo, qué papel jugará en el proceso electoral del 2017 en el estado de México? seguramente ninguno. Dice su dirigente estatal, que faltan dos años, sin embargo tanto el PRI como Morena ya están buscando las estrategias mejores para ganar la gubernatura, en tanto el Sol Azteca sigue sumido en su crisis de credibilidad porque en el proceso electoral del pasado 7 de junio no salió muy bien parado con los mexiquenses a diferencia del partido de López Obrador, quien se llevó las referencias al igual que en el DF, el perredismo se desinfló de manera estrepitosa.
Esta situación que ha privado en la izquierda mexicana no es de ahora, siempre ha existido esa rivalidad por el caudillismo, primer lo fue Cuauhtémoc Cárdenas, ahora lo es Andrés Manuel López Obrador, quien abandonó las filas perredistas para formar su propio partido, sin embargo, su organización Morena siempre desdeñó a los verdaderos perredistas, quien hoy algunos abandonaron sus filas para integrarse a esa organización política.
En el caso de Morena Fundado hace menos de 2 años para cambiar impulsar el cambio de régimen, Morena tiene principios éticos y críticos que además práctica. Tiene un programa estratégico: el “nuevo proyecto de nación” por el que ha combatido denodadamente como lo hizo en la defensa del petróleo y en la pasada elección. Tiene una organización nacional con cerca de cuatro millones de adherentes y presencia en todos los municipios.
Y tiene en AMLO un líder incuestionable. Es, además, una organización de lucha, capaz de moverse como un gran ejército comicial. Morena es la más consistente agrupación de la izquierda en la historia de México, un movimiento con principios, programa, estructura y liderazgo en lucha por el cambio verdadero con métodos pacíficos y desde la sociedad. Morena es un gran movimiento plural e incluyente pero en la práctica es también un partido, más partido que muchos de los que dicen serlo. No lo que la legislación mexicana exige, si lo que la historia demanda. El PRD también lo tiene, cuál será la diferencia?
Decir que la izquierda mexicana es la que representa Morena es escupir para arriba, ya que cuando hoy los integrantes de esta organización eran perredistas nadie decía nada y señalaban que era el verdadero partido de izquierda, mal memoria tienen algunos líderes y políticos que no recuerda que se formaron en el PRD. Las declaraciones del dirigente de Morena, Martí Batres en el sentido de que los integrantes de esta organización si son de izquierda son muy preocupantes, porque ellos apenas empiezan, mientras que el PRD ya tiene una historia ganada.
“Hoy el PRD es un partido muy fuerte, un partido que goza de la confianza de a la ciudadanía y desde luego obligado a responder a esa confianza, responder con trabajo, corresponder con la defensa de los intereses de la población que hoy tanto de los que votan y simpatizan con el partido como también aquellos que no simpatizan, asegura Omar Ortega, quien por cierto aún no sabe si va dejar la presidencia del partido en el estado de México debido a que ya es diputado federal electo, aunque los estatutos no lo especifican todo dependerá de lo que se acuerde en el consejo nacional. Lo cierto es que si el PRD no unifica fuerzas y pacta con las tribus seguramente seguirán a la baja y una de esos pactos debería ser con Morena, aunque AMLO no lo acepte. Hasta mañana y ojo cuídese de los falsos mesías que sólo buscan sus intereses personales. Comentarios a[email protected]