El más alto representante del Vaticano ante Naciones Unidas, el arzobispo Silvano Tomasi, dijo que el uso de la fuerza puede ser necesario para parar los ataques del autodenominado Estado Islámico contra cristianos y otras minorías.
En declaraciones a un sitio de católicos en internet, Tomasi acusó a los yihadistas de cometer genocidio.
El arzobispo agregó que cualquier coalición contra Estado Islámico debe incluir a países musulmanes.
Es tradicional que el Vaticano se oponga a cualquier intervención militar en la región, pero el papa Francisco describió el uso de la fuerza como algo legítimo si sirve para frenar una agresión injusta.