REDACCIÓN
El pasado sábado en la madrugada, el senador del PAN, Javier Corral Jurado, fue trasladado al Centro de Sanciones Administrativas e Integración Social del Distrito Federal (El Torito), por conducir con una ingesta de alcohol superior a la permitida.
Sin embargo, el legislador solo estuvo en El Torito ocho horas con 48 minutos, debido a que tramitó un amparo para quedar libre, tal como hizo en su momento el entonces dirigente del PVEM, Jorge Emilio González Martínez, El Niño Verde.
Corral fue sometido a revisión en el punto del alcoholímetro ubicado en la esquina de Tres Cruces y Francisco Sosa, en la delegación Coyoacán.
De acuerdo con la ficha correspondiente, citada en una nota periodística por el diario Excélsior, el senador Corral registró tener en su cuerpo 0.66 miligramos de alcohol por litro en la sangre, lo que lo hizo acreedor a una sanción de arresto inconmutable por 21 horas.
Hace unas horas, el senador Corral explicó a través de su cuenta de Facebook que efectivamente fue retenido el pasado sábado luego de una revisión el alcoholímetro.
Rechazó que en el momento de la detención se encontrara en estado de ebriedad, como lo publicaron algunos medios, y confirmó que tramitó un amparo, pero “no para eludir el cumplimiento de la sanción, sino para poder acudir a un compromiso ineludible el sábado”.
“Debo decir que en ningún momento me opuse al procedimiento, ni ejercí influyentismo alguno, colaboré con las autoridades, porque creo en la medida, como se los hice saber a los agentes y al juez cívico”, afirmó Corral.
El 17 de febrero del 2013, el senador del PVEM, Jorge Emilio González Martínez, fue remitido al Torito por conducir con ingesta de alcohol superior a la permitida por el Reglamento de Tránsito.
Esta acción generó una ola de indignación por el “influyentismo” del Niño Verde, quien ante la presión social se vio obligado a regresar al día siguiente a cumplir con su sanción.