AGENCIAS
La violencia en Sinaloa ha disminuido un año después de la captura del capo del narcotráfico Joaquín el “Chapo” Guzmán, afirmó hoy a Efe el secretario de Seguridad Pública estatal, Genaro García Castro.
Aunque tras la captura de Guzmán, el 22 de febrero de 2014 en Mazatlán, se creyó que se iba a recrudecer la violencia en la entidad, los índices delictivos han disminuido, indicó el funcionario.
“No consideramos que hubo ningún recrudecimiento, porque la tendencia a la baja ha seguido constantemente”, dijo.
Al referirse a la situación de seguridad en la entidad tras la captura del capo, el subprocurador de justicia (vicefiscal) de Sinaloa, Martín Robles Armenta, también afirmó que los homicidios dolosos continúan a la baja.
“Los indicadores nos reflejan los delitos a la baja, es cierto que hay cosas que se tienen que hacer en las cuales se está trabajando”, dijo Robles Armenta.
Para la conmemoración del primer aniversario de la captura de Guzmán, las autoridades de Sinaloa informaron que estarán en alerta ante la posibilidad de que se pueda reportar alguna muestra de apoyo al narcotraficante, como ocurrió tras su detención.
Guzmán, líder del cártel de Sinaloa, fue capturado por agentes federales hace un año en un condominio de Mazatlán (noroeste de México).
Al momento de su detención, Guzmán era el capo del narcotráfico más buscado en México y Estados Unidos, y considerado uno de los más importantes del mundo.
Luego de la captura de Guzmán en Sinaloa, se realizaron al menos dos multitudinarias marchas con más de 3,000 personas que exigían la liberación del capo.
Además, el condominio en el que se registró la captura se convirtió en un atractivo de turistas que se tomaban fotografías en el lugar donde había caído el poderoso narcotraficante, a quien en el pasado la revista Forbes incluyó en su lista de hombres más ricos del mundo.
Guzmán y el fugitivo Ismael Zambada García, alias el “Mayo”, eran los cerebros del cártel de Sinaloa.
Tras la captura del “Chapo” Zambada asumió el liderazgo del grupo, que junto con Los Zetas son consideradas las organizaciones del crimen organizado más poderosas de México.
El “Chapo”, nacido en 1957 en La Tuna (Sinaloa), comenzó su carrera criminal en la década de 1980 colaborando con el jefe del cártel de Guadalajara Miguel Ángel Félix Gallardo.
Tras la fractura que se registró en el cártel de Guadalajara, por la detención en 1989 de Félix Gallardo, el “Chapo” creó el cártel de Sinaloa, una poderosa organización criminal que ha tejido alianzas con mafias de América, Europa, África y Asia.
Previo a su detención hace un año, el “Chapo” había sido capturado en 1993 en Guatemala, país que lo entregó a México.
El 19 de enero de 2001, el “Chapo” se fugó de la prisión de Puente Grande, estado occidental de Jalisco, a bordo de un camión de limpieza gracias a la ayuda prestada por algunos funcionarios del penal.