AGENCIAS
El artista británico Brian Nissen, quien ha vivido gran parte de su vida en México, asegura que las tres cosas que mejor funcionan en este país son la cultura, el crimen y la corrupción, que además crecen sin parar.
«Lo que yo puedo decir es que las tres cosas que funcionan a tope en México son la corrupción, el crimen y la cultura, son todas distintas y yo creo que las tres van en aumento», confesó en una entrevista con Efe.
Nacido en Londres en 1939, aterrizó en México en los años 60 para descubrir un país lleno de vida que inmortalizó en unos dibujos de recién llegado, reunidos hoy en el libro «Farándula», publicado hace unos días.
En aquel entonces, recuerda, la capital mexicana era una ciudad de 6 millones de habitantes «muy fácil de transitar», en la que «había muchas fiestas, la gente se veía mucho» y «no había la violencia».
«Después de una fiesta a las dos de la mañana íbamos a pasear al Bosque de Chapultepec sin ningún temor ni nada, hoy cosa impensable», comentó.
En la actualidad, con cerca de 20 millones de habitantes, la ciudad se ha vuelto más insegura, al tiempo que la cultura es «más rica» que en aquellos años, pues «hay grandes escritores, grandes pintores, buenos museos, hay una actividad cultural estupenda».
La vida, la alegría y el color de la Ciudad de México de los años sesenta y setenta quedó plasmada por el británico en más de tres centenares de dibujos que encontró en unas cajas abandonadas, en una de sus mudanzas.
Hace un par de años, contó, le ofrecieron hacer una exposición en el Palacio de Bellas Artes de sus primeros años de trabajo y le tocó revolver su estudio.
Y es que los estudios de los artistas no solamente sirven para trabajar, sino que «tienden a ser casi forzosamente bodega o almacén», apuntó.
«Encontré cinco cajas de dibujos de los sesenta y setenta de buen tamaño, unos 320 o 340 dibujos, no sabía que los tenía, no los tenía en mente, estaba borrado por completo y era como encontrar un tesoro», explicó el pintor y escultor.
Lo que reflejan esos dibujos es su llegada a México en el año 63. «Llegué a un país totalmente extraño para mí, no conocía a nadie, no hablaba el idioma y empecé un periodo de aprendizaje para a la vez desaprender, porque llegué con un bagaje cultural de mí país natal y la experiencia de México me fue cambiando».
Conforme fue adentrándose en esta cultura encontró «dos países, Inglaterra y México, que son dos culturas que tienen enorme sentido del humor» por esa «afición al juego verbal» que es «una manía nacional».
Se ven así unos dibujos «llenos de ironía muy inglesa y de una cachondería muy mexicana». «Esos dibujos son sorprendentemente espontáneos, muy libres, yo diría hasta alborotados, pero también reflejan la edad en que los hice, 24 o 25 años», agregó.
De entre todos ellos y una vez que logró familiarizarse con sus olvidadas obras, hizo una selección de unos 120 para «Farándula», que es como él veía al México de entonces, un país lleno de cosas sorprendentes.
Este libro está acompañado de textos del propio Nissen y de escritores como Elena Poniatowska, quienes hablan sobre su obra o sobre algunas particularidades que retrataba como dibujante.
Pese a que en 1978 Nissen se mudó a Nueva York, nunca ha roto sus lazos con la capital mexicana, una de las cuatro ciudades de su vida, junto con Barcelona y su Londres natal. Cuatro urbes que en la mente del artista ya son solo una.
«Tengo cuatro ciudades y me encanta la idea, encuentro muy rica esta convivencia entre culturas» que ha hecho que «con los años se han fundido en una sola ciudad», indicó.
Tras toda una vida dedicada a las diferentes artes, Nissen se siente todavía con plenas ganas de trabajar y actualmente está haciendo «una serie de pinturas en relieve» que están «marcando una dirección nueva».
«Ya veremos, pero me tiene muy entusiasmado», dijo el artista, quien descartó que vuelva a tener otro encuentro sorpresa con su obra escondida, pues esas cosas «solo pasan una vez en la vida».
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