BBC
Guido Montoya Carlotto o Ignacio Hurban, el nieto recuperado de la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, habló este viernes por primera vez en público durante una conferencia en la sede de las Abuelas de Plaza de Mayo, en Buenos Aires.
«Estaba en casa, tocando el piano, tomando mate y bizcochitos, cuando me llamaron para decirme que era nieto de Estela de Carlotto. Estoy conmocionado, hace muy poco que pasó todo esto y me parece maravilloso y mágico», dijo.
El músico, que estuvo acompañado por su abuela y otros miembros de la familia Carlotto, dijo que seguirá usando el nombre de Ignacio, al que está «acostumbrado».
«También entiendo que hay una familia para la que yo soy Guido, me siento cómodo con eso y con la verdad que me toca, estoy feliz. Hace sólo dos días que sé quien soy de verdad», aseguró.
Respuestas
Guido Montoya Carlotto, nacido en 1978 cuando su madre estaba detenida, recuperó esta semana su verdadera identidad.
El que hasta hace solo unos días era conocido con el nombre de Ignacio Hurban es músico y fue criado en el campo por personas que él creía sus padres biológicos.
«Me preguntaban de dónde salía mi pasión por la música y nunca supe contestar. Ahora tengo respuesta», dijo en referencia a su verdadero padre biológico, un militante de izquierdas del sur del país que también era artista.
Hurban se acercó voluntariamente a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad, que dirige Claudia Carlotto, su tía, para hacerse análisis genéticos porque dudaba de sus orígenes.
Los estudios que se realizó demostraron que era hijo de Laura Carlotto, secuestrada en noviembre de 1977 por fuerzas del régimen militar cuando estaba embarazada, y Oscar Montoya, que también fue detenido y muerto.
«Yo quisiera que esta situación sirva para potenciar esta búsqueda y entendamos todos la importancia de cerrar estas heridas», aseguró el nieto 114.
Primera foto
Además, este viernes Guido – Ignacio subió la primera imagen del reencuentro entre ambos en su cuenta de la red social Twitter.
«Gracias, muchas gracias», escribió Guido junto a la fotografía.
Por su parte, Estela de Carlotto dijo que las personas que criaron a Guido como hijo lo hicieron «bien».
«Es tan bueno, es tan sano… Lo criaron bien. Él no pregunta, recibe y escucha con un respeto enorme», detalló de Carlotto, de 83 años, en una entrevista con la emisora argentina Radio del Plata.